MIKEL LANDA “EN BAHRAIN SE GASTÓ EL AMOR”
El español, fichaje estrella del Soudal Quick Step de Remco Evenepoel, explica en MARCA su llegada y deseos ya alistado en el potente conjunto belga
Asus 34 años, Mikel Landa sabe que debe dar otro vuelco a su carrera. El final está cerca, pero aún le quedan retos interesantes por pelear.
Pregunta. ¿Imaginó que firmaría por Soudal? Respuesta.
Es un equipo totalmente diferente a los que he estado. Buscaba algo diferente, algo que me motivase para seguir estos años. Me he encontrado un equipo muy abierto, que me ha acogido muy bien. Tiene una cultura diferente. Ahora esperemos que, con las posibilidades de Remco, se quieran disputar más las grandes. Quiero aportar y seguir disfrutando.
P. ¿Ya es ‘íntimo’ de Remco? R.
En general hay buen ambiente. Estoy intentando conocerle mejor a él fuera de la bici. Es un chico normal, con mucha presión y ambición. Pero, en el fondo, una persona normal.
P. Desde fuera parece que tiene mucho carácter. R.
Es muy impulsivo, para lo bueno o para lo malo no se esconde. Cuando se enfada, parece que se enfada.
P. ¿Han compartido habitación con Evenepoel? R.
No. Él lleva más tiempo aquí y tiene gente que le aporta otras cosas. No hemos coincidido todavía.
P. ¿Cómo fue su fichaje? R.
Se interesaron tanto Patrick como él. Él primer contacto fue de Patrick, pero seguido me llamó él. Me dieron buena impresión. La llamada de los dos me animó a dar el paso. Fue entre Tour y Vuelta.
P. Su despedida de Bahrain, ¿cómo fue? R.
Hemos estado cuatro años juntos. Esto es muy intenso...
P. Se gastó el amor... R.
Se gastó, sí. Se gastó el amor. Llegó el momento de que nuestros caminos se separasen. Estoy contento de haber estado ahí y contento de haber salido.
P. Aún tiene mucho que decir. R.NO
sé. Tengo las cosas claras. Quiero aportar todo lo que he aprendido. Quiero ayudar a ganar una grande a Remco y también tener mi propia ambición. Quiero volver a disfrutar de correr Lavuelta.
P. ¿Cómo vivió todo el tema de la fusión? Firmó y casi vuela todo por los aires. R.
Lo llevaron muy en secreto. Eran temas importantes. Lo tenían que hablar los que lo tenían que hablar. Estuve ajeno. Por un lado bien porque no me enteraba de nada, pero por otro lado tenía esa incertidumbre. Se resolvió como todos queríamos.
P. Euskaltel, Astana, Sky, Movistar, Bahrain y Soudal... R.
He tenido mucha suerte de estar en grandes equipos y las cualidades para estar en la pelea de las grandes. He podido estar donde he querido.
P. ¿Qué se lleva de cada uno de ellos? R.
Astana ha sido el equipo de mi corazón. Sólo tengo buenos recuerdos de allí. Llegué sin expectativa. Era joven, venía de Euskaltel y tengo buenos recuerdos. En Sky conocí otro método más estricto y medido. Luego se convirtió en algo más aburrido. En Movistar disfruté mucho. En Bahrain he estado muy cómodo hasta que nuestros objetivos se separaron porque eran diferentes. Espero encontrar aquí una nueva familia que me aporte mucho. Euskaltel fue el que me dio la oportunidad. No era consciente de muchas cosas porque era joven y no era fácil. Pero descubrí que, gracias a ellos, quería ser ciclista profesional.
P. ¿Se imaginaba en Euskaltel que viviría cosas tan grandes y que, a su vez, se metería en tantos líos?
R. Ni mucho menos. Eso me ha ayudado también a no tener una expectativa alta. Me he centrado en el día a día he ido disfrutando.
P. Hay muchos que dicen ‘mucho Landa, pero luego no gana...’ R.
Ya vemos que aquí ganan pocos, las carreras las ganan uno. Estoy contento con mi trayectoria. Nunca me hubiera imaginado estar donde he estado, peleando con quien he peleado. He sido incluso favorito en alguna carrera. Estoy contento por todo lo que he conseguido.
P. Ha perdido explosividad, pero ha ganado en experiencia. R.
Al final la experiencia te aporta otras cosas. Eres un corredor más completo y maduro. Lo que te falta físicamente lo puedes suplir mentalmente.
P. ¿Qué tiene que hacer para ganar? Ya no puede descolgar al resto... R.
Esto se ha igualado mucho. Es más fácil ganar un puesto cuando fallan los demás que cuando tienes tú el día súper. Hay que saber leer bien las carreras e intentar sobrevivir el día que los demás tienen el día malo.
P. ¿Qué estará haciendo Landa en cinco años? R.
Me empiezo a plantear esa pregunta porque se va acercando el final. Espero seguir disfrutando de la bici y tener algún añito por delante.
P. Ni entonces ni casi ahora se puede cazar a Pogacar, Vingegaard y compañía, ¿qué piensa al verlos? R.
Está claro que están a un nivel por encima. El nivel de Vingegaard este año en montaña y crono ha sido impresionante. Pogacar vemos que es un corredor más completo porque puede ganar Flandes y pelear el Tour que es algo que se ve pocas veces. Corredores como Remco son los que pueden plantarles cara, los demás estamos lejos.
Tengo la espina del Tour’17, me quedé sin foto en el podio por sólo un segundo”
P. ¿Qué hacen ellos que no haga Landa? R.
El deporte es así. Nos sacrificamos igual. Entrenamos igual de duro, pero hay genéticas. Hay corredores con mejores cualidades que marcan la diferencia.
P. ¿Cuántos chuletones ha comido este invierno? R.
“Quiero mantener el ‘Landismo’, ayudar a Remco y aprovechar las oportunidades”
He disfrutado del invierno. Como lo vengo haciendo siempre. Creo que es lo que me da la energía para el resto del año. No sé número, pero hemos disfrutado con amigos y familia.
P. ¿Qué espina le queda en su carrera? R.
Tengo la espinita del podio del Tour de 2017, que me quedé a un segundo. Echando la vista atrás ese segundo podía haber salido de cualquier sitio. Y es una pena no tener esa foto del podio.
P. ¿Cuántas ‘cabras’ tiene en casa? Las cronos... R.
Sólo una. Una que fue especial, con la que hice el último cuarto del Tour. Las cronos han sido un lastre, sí.
P. La última, ¿qué se pude esperar este año de Landa? R.
Este año espero seguir manteniendo vivo el ‘Landismo’ y poder seguir disfrutar mucho de mí y del ciclismo en general.