Ferrovial gana contratos en Norteamérica por 1.100 millones
bueno de Bruselas por lo referido al régimen de subvenciones extracomunitarias.
En el trámite regulatorio no se esperan sorpresas. El vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, no ha expresado reticencias, pese a reconocer que el banco central prefiere las concentraciones transfronterizas. El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha recordado en el Congreso que su obligación es atender a la estabilidad financiera, aunque cree que es “buen momento” para analizar su efecto sobre la competencia.
Los presidentes del supervisor del mercado, la CNMV, y de la autoridad de la competencia, la CNMC, tampoco han dado muestras de rechazo. El primero, Rodrigo Buenaventura, ha dicho que garantizará que la oferta “llega a los accionistas del Sabadell”, mientras que la segunda, Cani Fernández, ha precisado estos días que “más bancos no suponen un mayor nivel de competencia”.
Los elementos de incertidumbre son sobre todo el veredicto de los accionistas del Sabadell y el rechazo del Gobierno, no tanto a la opa como al posterior proceso de fusión que el BBVA desea promover una vez superado el 50% del capital. El ministro de
Economía, Carlos Cuerpo, reiteró el jueves, en la reunión anual del Cercle d'Economia, su rechazo a la integración y aludió además a los efectos negativos sobre Catalunya.
Por su parte, el consejero delegado del Sabadell, César González-Bueno, destacó ayer en declaraciones a TV3 la “unanimidad” de la clase política y de la sociedad al rechazar la opa. No ve la razón, según dijo, por la que “España y, sobre todo, Catalunya vayan a perder la enorme facilidad de tener un banco como el Sabadell”. En lo que sí coincidió con el BBVA fue en decir que el “principal enfoque” serán siempre los accionistas.
Conforme a lo ya anunciado, el BBVA ha presentado la oferta ante la CNMV antes del mes de plazo previsto por la legislación desde la publicación del anuncio. El banco calcula que la operación quedará completada en un periodo de entre seis y ocho meses.c
Ferrovial se ha adjudicado a través de su filial estadounidense Webber varios proyectos en Norteamérica valorados en 1.200 millones de dólares (unos 1.100 millones de euros). Lo hace apenas unos días después de haber empezado a cotizar en el Nasdaq de Nueva York.
Los nuevos contratos le permitirán entrar en un nuevo estado, el de Tennessee, y reforzarse en la región del mundo que más aporta a su cuenta de resultados. Cerca del 80% de la valoración de la compañía procede de Estados Unidos y Canadá.
Las operaciones las realizará a través de Webber, una empresa comprada en el 2005, con sede en Houston. Desde entonces, la compañía ha ido creciendo y ganando relevancia en la mejora de carreteras, puentes e infraestructuras de agua en once estados del país.
En Texas, el Departamento de Transporte ha adjudicado a la compañía dos contratos por más de 370 millones de dólares para mejorar la seguridad en carreteras con alto volumen de tráfico pesado.
En el mismo estado, PLW Waterworks, la división de infraestructuras de agua de Ferrovial, se encargará de ejecutar tres contratos de agua por 326 millones de dólares.
El Departamento de Transporte de Tennessee ha adjudicado a Ferrovial su primer contrato en el estado, valorado en 66 millones de dólares, para el mantenimiento de 460 kilómetros de carreteras en Nashville.
El Departamento de Transportes de Florida también ha seleccionado a la compañía para realizar mejoras en la carretera I-10 por 91,8 millones de dólares. Por último, Ferrovial ha conseguido dos contratos en Canadá valorados en 102 millones de dólares cada uno.c
La entidad presidida por Carlos Torres aclara que no es necesario esperar a la CNMC para lanzarla
El Sabadell destaca la “unanimidad” política y social contra la operación y dice tener el foco en el accionista