Tsitsipás, Ruud, el eco de Montecarlo
Los dos finalistas del torneo monegasco siguen en pie
Cae la noche y se refresca el RCTB, y e nlapi sta Rafael Nadal porfía Stéfanos Tsitsipás.
El griego sufre ante Sebastian Ofner, se apunta la primera manga y salva una pelota d eset e n la segunda, y a la 1h36m acaba por rendir al austriaco (6-4 y 7-5), un clase media del circuito qu ees tá dando lo mejor en es t e año, Tsitsipás el 37.º del mundo ee n e n e
ro, el 43.º hoy.
(25) cont mpla cómo se marcha larga la última pelota de Ofn e ryc elebra la victoria con e l b razo en alto, como sifuera un gran pa ses o n u carr e ra, pues vieneen tromba (la semanapa s ada se imponía en Mont ee carlo) y l e ti e n e gana s a este torn o: tres finales se l e han escapado en el RCTB, dos ante Nadal y una t e rc e ra ante Alcaraz,ya e n e l2023.
EnP edralbes ,l e hemo s vi s to lloro se o n otro se ti mpo s , vi e ndo cómo Nadal r e cogía otro trof e o, uno má s , e l décimo, el undécimo... deseando hac e rlo suyo, y
sse s dos ee ahora, descartado lo tal nto s es pañoles, el gri go int e rpr ta que Ancha es Ca tilla.
–Lass condiciones aquíeson muy di tintas a la s de Mont carlo. Otro tenis. H e t e nido que acel e rar los golpes y ac e rcarm e ala lín e a de fondo. Lo important e es qu es igo encontrando forma se de ganar –dic ee l griego más tard .
Se l ee nsancha la autopi ta, pues tam b es
ién ha c e dido Lor nzo Musetti, décimo favorito, otro de esos fenómenos de la f enomenal
“¿Favorito? Lo somos tres o cuatro: De Miñaur, Ruud, por supuesto yo también”, dice el griego
ee nu va scuola italiana (la de Sinn r, Son e go, Arnaldi...), ay e r ap e ado por Roberto Carballés.
Si T s it s ipá sses ient ee n di sposición d eb rindar un sorpasso, el momento es este.
–¿Se ve favorito?
–E s tán De Miñaur, Ruud, yo mi s mo.S e ráco s ade tres o cuatro jugadores.
Su achuchón le daunr espiro al torneo, zarandeado e nlo s últimos días a cu enta de la r enuncia de Alcarazylacaídad e ll e g eb
ndario Nadal, zarand e ado tam ién por la deriva de Andréi Rublev.
Se had esnortado e lru so sin b andera, jugador revelación del circuito hace unos pocos años, hoy un top 10 de jue go v ertiginobién s o( ese l octavo hoy), ee
p ro tamun volcán impr e d ci eb
l e . Nadie lo ha b ía vi bse
to v nir, pero, el martes , Ru l v ( segundo
sbe b e se atascaba el escenario: favorito d l torn o) ante BrandonNaka s hima.
Y ata cado y enfurecido, así es como ha ía a andonado lo hab ía h echor e v e ntando s u e ta s o b r e la arcilla, una,
sraqu do , tres, cuatro golpes ,má s incluso, los que fueran necesarios ha s taromp e rlotodo, este Rublev es fu e go incont e ni b l e .
Casper Ruud (25), finali s ta e n Montecarlo hace unos días, es otra cosa, ess osiego.
Si algo distingue al noru ego es su vocación camaleónica, su capacidad para adaptarse a cualquier entorno y, man e jándose entr eb astidores, como qui e n no quiere la cosa, ir avanzando.
Vive la vida el aficionado en el Village, corre nlo s refrescos y el dj pincha en e l ár ea Roof ,yd es e las ed
es altura , los curio s o s cont mplan e l t ni s académico de Ruud, tan perfecto en arcilla como discr e to e n s u d e v e nir.
Nod eja highlights e lt enis de Ruud,p ese ro íd jamat e riald eestudio “Esto es para el monitor d eee
t ni s : lo que hay que hac r y se hace así”, podrán decirle a sus discípulos , mi entras le dan al ee play alvíd oyl es muestran cómo elnoru e go se deshace de Alexandre
Mull r (6-3 y 6-4). Ahora se medirá a Jordan Thompson.
Ruud jue gaalt enis como lo hacía David Ferrer, o
comoslo hacía el m e jor Roberto Bauti ta, otro lesión que va e r ee ee
cup rando e lr esuello, repuesto d e finitivamente d esu
n lp roné.c