Semidesnudos y patriotas en Rusia
Reacción conservadora y proguerra contra una picante fiesta de celebridades
Una fiesta en un exclusivo club de Moscú, la mayoría de los invitados famosos y una oportunidad de lucir palmito. Nada tenía que salir mal y quitar la alegría a los asistentes en vísperas de Año Nuevo. Pero la idea inicial de la organizadora, la influencer y presentadora de televisión Anastasía Ívleeva, ha provocado esc·ndalo y reacción entre la conservadora burocracia rusa, jaleada por el patriotismo nacionalista de tiempos de guerra.
Ívleeva dijo a sus invitados que había que asistir “casi desnudo”. Aceptaron artistas que se han quedado en Rusia después de que el presidente ruso, Vladímir Putin, lanzara su campaña militar contra Ucrania en febrero del 2022. Muchos se comportaron como un buen invitado e hicieron caso al curioso código de vestimenta, pero eso les ha provocado no pocos problemas en la última semana.
Al poco de comenzar la celebración, el 21 de diciembre, en redes sociales los propios asistentes difundieron sus fotografías con vestidos y trajes semitransparentes. Uno de ellos, el rapero Vacio (seudónimo de Nikol·i Vasílyev) llegó vestido únicamente con un calcetín que le cubría los genitales.
La reacción no se hizo esperar. “Hay una guerra en el país, pero estas bestias y escoria est·n organizando todo esto, estos brutos a quienes no preocupa lo que est· pasando”, dijo en Telegram Vladímir Soloviov, el primer propagandista de la televisión rusa. Varios diputados conservadores y antiliberales, así como movimientos sociales, se dirigieron a la Fiscalía pidiendo una investigación en busca de propaganda LGTB.
Las autoridades de Rusia se han presentado en las últimas décadas como baluarte de los valores tradicionales frente a Occidente. El año pasado Rusia prohibió la propaganda “de las relaciones no tradicionales, de la pedofilia y del cambio de sexo” entre toda la población, endureciendo la ley del 2013, y el mes pasado el Tribunal Supremo declaró “extremista” al “movimiento social internacional LGTB”.
A muchas estrellas presentes les han cancelado conciertos. La cantante Lolita Mili·vskaya dijo al periódico RBK que la est·n “excluyendo de programas de televisión”. La retirada de publicidad también les causar· un grave daño económico. Ante estas amenazas, han grabado esta semana vídeos de disculpa, en algunos casos defendiendo su “patriotismo”.
Ívleeva ha difundido dos grabaciones. Dijo ser consciente del “momento tan difícil” que vive Rusia y pidió una “segunda oportunidad”.
El rey del pop Filipp Kirkórov reconoció haber “cometido un error”, pero aseguró que desconocía “la naturaleza de los eventos” que ocurrían en la fiesta y que se marchó de allí “en cinco minutos”. Según él, “en estos tiempos difíciles, momentos heroicos, un artista del pueblo se comporta de forma irresponsable si participa en cualquier evento”. Añadió que él es un artista y un patriota. “Lo que menos me gustaría es que un descuido por mi parte sea la causa de la restricción de mi creatividad en Rusia”, subrayó.
Dima Bil·n, el único ganador ruso de Eurovisión, también ha asegurado haberse ido a los pocos minutos. A pesar de conocer el código de vestimenta, dijo que llegó a la fiesta con cuello alto, una capa y pantalones, que recibió una invitación para una exposición de arte.
La periodista Ksenia Sobchak, hija del exalcalde de San Petersburgo Anatoli Sobchak, mentor e impulsor de la carrera política de Putin, también se disculpó. Pero en su vídeo señaló que “dónde y cu·ndo las personas adultas caminan con el culo desnudo es un asunto personal”. Pidió perdón a quien se pudiese haber sentido herido y dijo que “amo a mi país”.
De momento, la justicia ha alcanzado a uno de los invitados. El rapero Vacio fue sancionado este miércoles con 15 días de c·rcel y una multa de 200.000 rublos (2.000 euros) por vandalismo menor y propaganda homosexual. Vasílyev explicó que su intención era “sorprender” a los asistentes copiando en el calcetín que tapaba su pene una imagen de los
Encarcelado 15 días por propaganda LGTB el rapero Vacio, que se vistió solo con un calcetín en el pene
Red Hot Chili Peppers al reproducir la cubierta de su ·lbum de 1987. Un camino parecido puede recorrer la organizadora de la fiesta. La Hacienda rusa ha comenzado a investigar las cuentas de Ívleeva. Los inspectores creen que entre el 2020 y el 2022 evadió impuestos por valor de 130 millones de rublos (1,3 millones de euros). Según la prensa rusa, esto podría suponerle potencialmente cinco años de prisión.