Lío en la comisión de Justicia por la falta de traducción
el presidente del Tribunal Supremo, Francisco Marín Castán, después de que la semana pasada el magistrado cancelase la cita como respuesta a las declaraciones de la portavoz de Junts en el
Congreso, Miriam Nogueras, en las que señalaba directamente a jueces como partícipes de una persecución judicial a líderes independentistas. Castán trasladó al ministro la necesidad de que el Gobierno ponga todos los medios para que cesen los ataques contra el Poder Judicial. También le comunicó a Bolaños que este “clima de tensión creado como consecuencia de estos ataques” no facilita el pacto para la renovación del Consejo.
Por su parte, el ministro de Justicia, durante su intervención en la comisión, tendió de nuevo la mano al presidente del CGPJ, Vicente Guilarte: “Pueden contar conmigo”. De esta manera, le respondía a la reclamación que hizo ayer el presidente del órgano de los jueces al Gobierno para que no defrauden a los jueces en su apoyo frente a las acusaciones de lawfare.
Desde la semana pasada, Bolaños está haciendo un ejercicio de defensa pública de jueces y fiscales ante las acusaciones y los insultos vertidos. El acuerdo de ■ La ausencia del servicio de traducción simultánea embarulló el intenso debate registrado ayer en la comisión de Justicia oficiada en el Congreso después de que los representantes de Junts y ERC intervinieran en catalán ante las airadas críticas de los portavoces de PP y Vox. Las obras para la renovación del sistema informático de la Cámara Baja están en curso, pero no terminarán hasta ya empezado el 2024. /
“Quien cometa alguna injerencia o descalificación en los jueces, me tendrá enfrente”, dijo Bolaños
Menos explícito sobre este asunto fue el fiscal general del Estado, Álvaro García, que también tuvo que acudir a la comisión de Justicia para validar su cargo tras su nombramiento por parte del Gobierno. Tras mostrar su apoyo a todos los fiscales, incluidos los del procés, aclaró: “No emitiré ninguna declaración política partidista. De ningún partido. No me corresponde a mí juzgar ni explicar acuerdos de naturaleza política. El campo de la política tiene unas reglas de juego; el de lo jurídico, otras”, sostuvo.
García sí fue más tajante a la hora de criticar el informe de inidoneidad del CGPJ contra él tras el voto de ocho vocales del bloque conservador. El fiscal general del Estado acusó al órgano de los jueces de hacerle un “tribunal de honor” al emitir un informe de inidoneidad sobre él impulsado por el bloque conservador. Criticó a los ocho vocales por someterle “sin un expediente previo, sin alegaciones y sin rigor, pues acudieron a fuentes todavía desconocidas para mí”, para concluir que no era idóneo para el cargo. García sostuvo que el Consejo –al que califica de “caducado”– hace un “flaco favor” a la Fiscalía con sus informes, “impropio de juristas de reconocido prestigio”.c