Indignación en Gernika por el caso de abuso a una menor por parte de su entrenador
El presunto caso de agresión sexual continuada a una menor exjugadora del Lointek Gernika de baloncesto, a manos de su entrenador, ha puesto sobre la mesa el largo camino que aún queda por recorrer para poner coto a la violencia sexual en el deporte. Los hechos se remontan a m·s de dos décadas, fueron denunciados en junio del 2022 y se conocieron públicamente este domingo; sin embargo, el club, que tenía conocimiento del caso, no ha actuado con contundencia hasta que el asunto ha llegado a los medios.
El caso saltó a la luz pública este domingo a través de un reportaje publicado en El País, que daba cuenta de la denuncia presentada por una mujer de 38 años por un delito del que fue víctima entre 1998 y el 2001. El denunciado es Mario López, que la entrenó desde los 13 años, primero en el colegio y luego en el Lointek. La denuncia recoge que la amenazaba y atemorizaba, así como múltiples episodios de violencia sexual: una penetración anal, múltiples felaciones y constantes tocamientos.
La joven dejó el baloncesto al comenzar la universidad. López inició una exitosa carrera deportiva que la llevaría, tras pasar por las categorías inferiores, a convertirse en el entrenador del primer equipo, hoy en la m·xima categoría, así como en seleccionador nacional sub-16, sub-18 y sub-19.
En el 2022, la denunciante decidió reabrir el caso que había destrozado su vida. Contrató un abogado y el 13 de junio del año pasado presentó una denuncia contra López. Seis semanas después se conoció que, tras 11 años en el primer equipo, al Lointek
por “problemas de salud”.
El pasado verano, sin embargo, cuando el Lointek preparaba el regreso de López al banquillo, la Red Feminista de Gernika tuvo conocimiento del caso. Se reunió con el club para hacerle una doble petición: que sacar·n “de manera urgente” a López del campus de verano para niñas y, en segundo lugar, que no continuase como entrenador. Tras muchas vacilaciones, el club anunció que López no seguiría como entrenador, aunque sería el director deportivo. Este domingo se conoció el trasfondo de aquellas decisiones, al conocerse el esc·ndalo. El club alega ahora que no tenían constancia de la gravedad de la denuncia y, ahora sí, le ha cesado. Mientras, en Gernika miles de personas arroparon ayer a la víctima.c