La entrañable violencia de Billy
Movistar Plus+ estrena hoy la parte dos de la segunda temporada de «Billy el Niño», en la que, después del viaje por su pasado, conoceremos su cara más salvaje
SeSe estaba haciendo esperar. Y eso es lo malo y lo bueno de las producciones en las que Michael Hirst está involucrado como creador, que juega con nuestra impaciencia. Ya lo hizo con ‘Vikingos’ y ahora lo repite con «Billy el Niño», tomando acontecimientos históricos, de esos que todos hemos escuchado hablar, por muy lejos que nos toquen, y los convierte en una trama deliciosa, con tintes épicos y altamente adictivos, convirtiendo personajes absolutamente distantes en seres que parecemos llegar a conocer completamente, con los que empatizamos y nos llegamos a ali ar, por mucho que la historia nos diga que han sido de todo menos amigables.
Y si usted es uno de los que todavía no se ha dejado atrapar por «Billy el Niño», déjeme decirle que todavía está a tiempo, porque aunque cualquier capítulo de esta serie tiene el poder de atrapar sin haber conocido lo sucedido anteriormente, es mejor empezar desde el principio, para entenderlo que pasa por la cabeza de nuestro protagonista a la hora de tomar sus decisiones. Imprevisibles a veces, pero entendibles si conoces su pasado.
Así que póngase al día, porque este lunes 10 de junio Movistar Plus+ estrena la segunda parte de la segunda temporada de «Billy el Niño», y debo decir que nos sumerge aún más en el turbulento y fascinante mundo del legendario forajido del Viejo Oeste. A medida que la serie avanza, se hace evidente que los creadores han apostado por un enfoque más profundo y complejo, desarrollando no solo la figura de Billy, sino también el entorno y los personajes que lo rodean.
La narrativa se vuelve más intrincada en esta segunda mitad, explorando las motivaciones básicas de Billy, interpretado de manera brillante por Tom Blyth. Vemos a un Billy más maduro y calculador, luchando con sus demonios internos y las circunstancias externas que lo empujan cada vez más hacia el abismo de la ilegalidad. La evolución del personaje es notable, pasando de un joven impulsivo a un hombre que empieza a comprender las consecuencias de sus acciones. El antagonismo también se intensifica con la presencia de nuevos enemigos y desafíos. Cada personaje, desde aliados hasta adversarios, está bien desarrollado y aporta una dimensión única a la trama, comenzando por el propio J es se E va ns, interpretado magistralmente por el australia no Daniel Web ber, quien en conversación con LA RAZÓN, nos avanzó que «esta segunda parte comienza donde lo dejamos, en medio de la Guerra en el Condado de Lincoln, un conflicto violento impulsado por la corrupción y el dinero que se cobra una víctima crucial, John Tunstall, quien era mentor y figura paterna de Billy , que ahora está de luto. También ha perdido a su amada Dulcinea, lo cual terminó en una pelea feroz en la que él no quería renunciar a esa vida y ella necesitaba que él lo hiciera. Por fin está listo para ponerse esos zapatos y convertirse en General, básicamente ».
Con ese punto de partida, la situación empeora y Billy, tras declarar la guerra abierta, se reagrupa con sus aliados para enfrentarse a Jesse Evans, Murphy y las autoridadescorruptas del Anillo de Santa Fe. El enfrentamiento conduce a una sangrienta guerra mientras Billy lucha por mantener sus principios, la promesa que llevó a su familia a América y el amor de su vida.
La producción mantiene un alto nivel de calidad, con una atención meticulosa a los detalles históricos y culturales del Viejo Oeste. Los paisajes áridos y vastos, las ciudades polvorientas y los interiores detallados crean una atmósfera inmersiva que transporta al espectador a esa época. La cinematografía es impresionante, utilizando tomas amplias y paisajísticas que contrastan con momentos de intimidad y tensión.
El elenco sigue ofreciendo actuaciones sólidas. Tom Blyth lleva el peso de la serie con carisma y profundidad emocional. Sus interacciones con otros personajes, especialmente con su mentor y amigos, son creíbles y carga das de emoción. «Creo que, aunque ahora estén enfrentados, Jesse y Billy son reflejo el uno del otro, por eso se respetan, se admiran y también se pueden llegar a temer», comentó Webber acerca de la relación de su personaje con el protagónico, la que precisamente acapara el peso de estos cuatro nuevos capítulos, pues la serie no solo se enfoca en la acción y el drama, sino que también explora temas más profundos como la lealtad, la traición, la búsqueda de identidad y la lucha por la supervivencia en un mundo implacable. Estas temáticas son tratadas con sutileza y se entrelazan perfectamente con la trama principal, ofreciendo al espectador algo más que una simple historia de forajidos y leyendas. Una gran producción recomendada para todo el mundo, no solo para fanáticos del wéstern.
Daniel Webber: «Aunque ahora estén enfrentados, Jesse y Billy son reflejo el uno del otro»