«Mi repertorio no me permite otra cosa que cantar a la felicidad y a la tristeza»
Nueva etapa «Necesitaba sentir que pasaba página. Eso conlleva salir de la zona de confort y enfrentarte a nuevos retos»
Los inicios con el grupo Izal «Escribía mails a las salas con el nombre de Pilar, una mánager que no existía, simplemente para que nos tomaran más en serio»
¿Cómo afronta esta nueva etapa en solitario?
Creo que la palabra clave es ilusión, y también vértigo. Necesitaba sentir que de alguna manera pasaba página a una etapa (maravillosa) de mi vida y empezaba una nueva. Eso conlleva salir de la zona de confort y enfrentarte a nuevos retos.
‘El miedo y el paraíso’ es el nombre de su último álbum, ¿qué temas inspiran sus canciones?
Es un disco donde me abro en canal. Escrito tras un momento algo triste de mi vida, movido por la necesidad de convertir el daño en algo bello. Me ayudó muchísimo ponerme a escribir canciones para recuperar la ilusión.
Se marchó a una localidad costera a componer, como hizo Serrat con ‘Mediterráneo’...
Escapé del ruido, cambié las bocinas de los coches, los gritos en la calle, por el ruido de las olas del mar, y fue un gran acierto. Tuve ese privilegio. El de poder escapar. En ese rincón volví a encontrar la paz, me sentí seguro. Aislado. Fue clave para escribir este disco.
¿Fue complejo enfrentarse a un nuevo disco sin la banda con la que ha compartido tantos buenos momentos?
Fue un proceso distinto porque eso es lo que buscaba. Siempre escribo las canciones en la intimidad,
sin que nadie me escuche. Así lo hacía en Izal y así lo seguiré haciendo, pero sí que intenté hacer una producción más completa en mi casa, grabando una primera versión con muchos detalles que sobrevivieron en la grabación
final, en el estudio Blind Records de Barcelona, junto a Santos y Fluren (excelentes productores, mejores personas). Ser músico no fue su primera opción. Cambió la ingeniería por la música, ¿qué podía salir mal?
Afortunadamente, el tiempo le ha dado la razón...
Efectivamente, era una apuesta arriesgada, pero no salté sin red. Siempre pensé que tendría que volver a la ingeniería, pero que no quería quedarme sin intentarlo. Eso sí que habría sido duro, tenía que quitarme la espinita, lo intenté y salió milagrosamente bien.
¿Qué grupos o qué músicos han marcado su camino musical?
Queen fue una revelación cuando era muy peque, las melodías, cómo cantaba Freddie, los arreglos de guitarra de Brian May. Luego vinieron cantautores, Sabina, Serrano, Serrat... Después Extremoduro, la poesía cruda de Robe me parece maravillosa.
En aquellos primeros pasos con Izal inventó un personaje ficticio: la mánager Pilar….
Así es. Escribía mails a las salas con el nombre de Pilar, una mánager que no existía, simplemente para que nos tomaran más en serio. Aquella figura inventada nos consiguió más de un concierto y mejores condiciones. Era una mentira piadosa.