Para no perder de vista los precios
La recién creada asociación nacional de productores pide a las autonomías la creación de un observatorio para asegurar la rentabilidad
La preocupación por las bajas cotizaciones con las que da comienzo la campaña de almendra en España se ha traducido ya en reivindicación. Las organizaciones agrarias han sido las primeras en exigir medidas que eviten «la especulación» y permitan a los agricultores obtener unos ingresos adecuados para hacer frente al desembolso que supone la producción de este fruto seco, que ha tenido una destacada expansión en toda España al calor de unos precios (que no se han vuelto a repetir en los últimos tres años) que llegaron a rozar los nueve euros por kilo.
A esta demanda se suma ahora la asociación nacional de productores de almendra ecológica (Aepaec), que a partir de ahora aglutinará también a los productores de almendra convencional. Esta organización, con apenas unos meses de vida, urge la creación de un observatorio de precios que evite los vaivenes que ponen contra las cuerdas la rentabilidad y viabilidad de un gran número de explotaciones. Y así lo reclamará esta organización a todas las Comunidades autónomas, entre ellas la aragonesa.
Así se ha acordado en la última reunión celebrada por esta organización en Albacete, en la que se decidió ganar presencia y volumen integrando también a los productores de almendra convencional, según ha explicado su presidente, Rogelio Pardo.
De esta forma, esta asociación que se convirtió en realidad hace apenas unos meses pasará a denominarse asociación nacional de productores de almendra ecológica y convencional y tendrá su sede en Minglanilla (Cuenca).
Una de sus principales demandas, como ha señalado Pardo, va a ser reclamar a los responsables de todos los gobiernos autonómicos la creación de un observatorio de precios de la almendra, para evitar de este modo que los agricultores tengan que vender su fruto por debajo de costes.
«Los productores tienen que hacer frente a muchas anomalías, como el hecho de que los compradores de almendra impongan los precios, lo que les priva de tener la soberanía del producto», ha criticado el presidente de esta organización, que ha lamentado que uno de los referentes para fijar los precios en España es la almendra americana, de «peor calidad».
Sin embargo, esta referencia parece utilizar especialmente cuando la cotización es baja, porque, como ha asegurado Pardo, aunque la almendra estadounidense ha incrementado su precio en un 20%, dicho aumento no ha repercutido en el precio que reciben los productores españoles por un fruto que es «mucho mejor».
«LOS PRODUCTORES TIENEN QUE HACER FRENTE A ANOMALÍAS COMO QUE LOS COMPRADORES FIJEN LOS PRECIOS»