Hidalgo contra Víctor: dos entrenadores, dos estilos
El partido entre la SD Huesca y el Real Zaragoza se entiende desde las figuras de dos técnicos de diferentes trayectorias, métodos y maneras de ser
ZARAGOZA. Antonio Hidalgo y Víctor Fernández colorean los banquillos del SD Huesca y Real Zaragoza que ya está en fogones, cocinándose para que el domingo, en El Alcoraz, el fútbol diga cuál es el camino que toma cada equipo en la recta final de temporada. Es un partido entre vecinos, entre rivales en apuros clasificatorios y entre desiguales tendencias, una alcista y otra declinante, pero también es un pulso entre dos entrenadores cortados por diferentes patrones y contratados este año con una misma intención: reactivar a sus equipos y darles un nuevo rumbo.
Desde los banquillos, ambos pondrán el rostro a sus equipo y protagonizará un duelo entre dos escuelas, dos métodos, dos trayectorias, dos formas de ser y entenderse a sí mismo… Un Antonio Hidalgo de perfil bajo, moderado, humilde y sencillo que busca abrirse camino en el mundo del fútbol profesional y a quien el Huesca le ha dado el escenario para hacerse notar con un fútbol moderno, fresco, detallista y meticuloso. Enfrente, estará Víctor Fernández.
Un técnico transformado en personaje, un referente del zaragocismo y una leyenda del club elevado sobre un pedestal, con un verbo atronador, una particular manera de entenderse a sí mismo y su papel en la vida del Real Zaragoza, astuto, habilidoso en las relaciones públicas y mediáticas, y capaz incluso de convertir a sus más viejos críticos en sus más firmes devotos. Amante del fútbol emocional, vistoso, ofensivo, con un modo de desarrollar el juego inspirado en otros tiempos y métodos: Víctor Fernández estira su longeva carrera en el único lugar en el que puede hacerlo: su Real Zaragoza. Ahí cumple su cuarta etapa, ahora en misión de salvación y con el objetivo de asumir poderes más amplios y dominantes en el futuro más inmediato de la entidad.
El Huesca-Zaragoza, de este modo, se personificará en dos entrenadores de perfil muy distinto. A sus 63 años, Víctor Fernández es el entrenador en activo con más partidos dirigidos entre Pri