Heraldo de Aragón

Difícil calendario

- Alejandro Lucea

Hace unas semanas dijo Victor Fernández que el Real Zaragoza afrontaba su partido más importante. El encuentro de hoy no es el más importante porque a partir de ahora lo serán todos, pero es obvio que es trascenden­tal.

El Real Zaragoza inició la jornada a 6 puntos del descenso y anoche el colchón bajó a 4 al ganar el Amorebieta. Y tiene un calendario terrible: por ahora, esta tarde, el Elche; y después, dos desplazami­entos difíciles a los campos del Huesca y del Leganés.

Quedan ocho partidos, es decir poco tiempo y mucho trabajo por hacer. Víctor heredó un muerto y está intentando resucitarl­o. Está en proceso de mejora y el pasado sábado hizo un buen segundo tiempo. Se mostró fluido, miró a la puerta contraria, llegó al área y creó peligro que no convirtió. Estuvo bien, pero no dio para puntuar.

Desde que hubo el cambio de entrenador han pasado cuatro semanas y el Real Zaragoza ha sumado cuatro puntos de doce posibles. Si mantuviera este porcentaje terminaría la liga con 49, lo que no aleja todos los riesgos dada la reacción que están teniendo sus perseguido­res. Por otro lado, sería peligroso dejar los deberes sin hacer para las últimas jornadas que siempre son imprevisib­les.

Esta tarde el Elche viene a La Romareda, donde el Zaragoza ha sido irregular. Ha ganado 24 puntos de 51 posibles. Su rival es un equipo construido para subir a Primera de donde bajó la pasada temporada.

Han estado los ilicitanos en zona de ascenso directo recienteme­nte, pero una racha de tres derrotas consecutiv­as en el último mes los han dejado incluso fuera de la promoción.

El Elche trata de frenar su caída, necesita ganar y es un buen visitante, sólo hay dos mejores que él. De momento ya ha conocido las grandes dificultad­es que ofrece la Segunda División.

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