El último caso de sarampión obliga a extremar la precaución ante pacientes con síntomas compatibles
ZARAGOZA. Salud Pública confirmó la semana pasada un caso autóctono de sarampión en la provincia de Zaragoza, una enfermedad infecto-contagiosa que está en fase de eliminación, anterior a su completa erradicación. Ante este nuevo caso, detectado el día 20 de febrero en un varón adulto, han saltado las alarmas.
El último Boletín Epidemiológico de Aragón, publicado ayer, reconoce que es «fundamental extremar la sospecha diagnóstica ante pacientes con síntomas compatibles, establecer precauciones aéreas inmediatas y tomar muestras según el protocolo». La sospecha debe notificarse «de manera urgente» a Salud Pública por los cauces habituales.
En la Comunidad, en los últimos años se produjeron cinco brotes: entre 2011 y 2013 hubo tres, coincidiendo con una onda epidémica en España; en 2018 se notificó un brote poblacional; y en 2019 otro con transmisión en entorno sanitario, ambos en la provincia de Huesca.
La medida más eficaz para eliminar el sarampión y la rubeola es la vacunación. En España están disponibles la vacuna triple vírica (TV), que contiene virus vivos atenuados de sarampión, rubeola y parotiditis, y la tetravírica, que contiene además virus atenuados de varicela. Las vacunas frente a sarampión y rubeola se administran con una pauta de dos dosis: a los 12 meses y los 3 años. Además, se recomienda la vacunación con dos dosis de TV con un intervalo entre dosis de al menos 4 semanas, a las personas nacidas en España a partir de 1970 y sin historia de vacunación con TV. Si hubieran recibido con anterioridad una dosis, se administrará una segunda, siempre respetando el intervalo citado. En Aragón las coberturas actuales son altas: en 2022 se alcanzó el 98,3% en la primera dosis y el 96,2% en la segunda).
Por otro lado, entre el 19 y el 25 de febrero la incidencia de gripe fue 27,4 casos por 100.000 habitantes, por debajo del umbral basal establecido en 59,6 casos.