El Frob cobra su primer dividendo de la extinta Bankia
BFA, la matriz de Bankia, está ya liberada de los millonarios gastos que le causaron durante años pleitos con inversores por participaciones preferentes y por la salida a Bolsa de Bankia, que llegaron a ascender a 500 millones anuales. Además BFA ha dejado de tener financiación externa.
Todo eso ha permitido que el Estado empiece a cobrar dividendos por primera vez en su historia por la participación heredada de Bankia que ahora ostenta CaixaBank: 335 millones. Hasta ahora, el dividendo quedaba retenido en el balance de BFA.
Esos ingresos nunca había salido del grupo bancario. Se quedaban dentro del balance de BFA, la sociedad cabecera en la que se aparcaron los peores activos del grupo cuando Bankia salió a Bolsa.
El dividendo de CaixaBank ha permitido elevar sensiblemente el patrimonio neto de BFA en los estados financieros del organismo público de 2023, publicadas ayer.
El Frob fue creado para gestionar el rescate de las cajas de ahorros y se encarga de gestionar la ejecución de los procesos de resolución de bancos. Cerró el año pasado con un beneficio de 456 millones de euros. Su entrada en números positivos se produjo por primera vez en 2022, espoleada por la subida bursátil de CaixaBank y la disminución del deterioro contable de BFA.
El organismo creado para gestionar el rescate de las cajas de ahorros ganó 456 millones en 2023
Subida bursátil
La acción de CaixaBank acumula una subida del 146% desde el anuncio de la fusión por absorción de Bankia.
Tras las últimas recompras de acciones de CaixaBank, la participación del Frob en el mayor banco español ha saltado del 17,3% al 17,8%.
En teoría, el Frob debe salir completamente del capital de CaixaBank antes de diciembre de 2025, aunque este plazo es prorrogable. Es competencia del Gobierno español y ya se ha extendido en el pasado. Será entonces cuando se determine qué volumen ha recuperado el contribuyente español de las ayudas a las cajas rescatadas. Ahora ronda el 10%.
El valor neto contable de BFA en las cuentas del Frob asciende a 6.749 millones. Hace un año era de 6.343 millones.
Banco de Valencia
Además de varias nacionalizaciones, el Frob también se hizo cargo de buena parte de las pérdidas futuras de las carteras de crédito más problemáticas de algunas cajas, los llamados EPA (esquema de protección de activos).
En 2022 venció el último, el de Banco de Valencia, cuya liquidación definitiva se hizo en junio de 2023.
El final de estos pagos ha permitido liberar provisiones en las cuentas del Frob.
Este organismo tiene también una participación de control en Sareb. La inversión lleva tiempo provisionada al 100%. La sociedad, que engloba gran parte de la herencia inmobiliaria de las cajas de ahorros rescatadas, debe liquidarse dentro de tres años.