Los accidentes laborales graves se disparan un 52% en Castellón en 2023
El crecimiento es muy elevado frente a una media autonómica de apenas el 3% Los leves bajan, pero los dos mortales de este año igualan ya la cifra total del pasado
Los datos de siniestralidad laboral en la provincia de Castellón al cierre de 2023 aportan una primera buena noticia al hablar de descenso en el número de accidentes y va acompañado del desplome de las víctimas mortales, lo que también daría una idea de una evolución positiva general. Sin embargo, ambas quedan totalmente empañadas por un crecimiento muy alto de los casos que están clasificados como graves y que, en algunas ocasiones, concluyen con el fallecimiento del trabajador.
El balance del último ejercicio económico que acaba de hacer público el Instituto Valenciano de Seguridad y Salud en el Trabajo (Invassat) muestra que estos últimos siniestros, bien en el puesto de trabajo o durante el recorrido desde o hasta el domicilio, se han disparado en Castellón, al crecer un 52% en solo doce meses.
De hecho, en 2022 hubo 25 accidentes graves, mientras que en 2023 el número se elevó hasta los 38. Otro dato con signo claramente negativo es que este aumento solo se produce en la provincia dentro de su contexto más cercano, la Comunitat Valenciana, ya
que el alza autonómica es de apenas un 3%. Se trata del tipo de percances en el trabajo que más preocupan, razón por la que, como ya publicó Mediterráneo, a principios de este año se tomó la decisión de incorporar tres nuevos inspectores de trabajo para hacer frente al auge de accidentes laborales graves que registran las empresas de la provincia.
Los nuevos efectivos también tienen el objetivo de atajar la mortalidad en este ámbito. El año pasado los siniestros que implicaron alguna muerte se desplomaron, al pasar de los ocho de 2022 a
únicamente dos decesos derivados de la actividad laboral.
Sin embargo, Castellón ya ha igualado la cifra de dos fallecimientos este año. En enero, en Atzeneta, como recogió este diario, un hombre de 68 años murió aplastado por su camión en las obras de un centro educativo en la localidad. Ya en febrero, un trabajador murió y otro resultó herido en dos accidentes laborales ocurridos en l’Alcora y Orpesa.
En lo que se refiere al conjunto de los siniestros en el ámbito laboral, la inmensa mayoría de los que se producen, el total fue en 2023
de 7.748, lo que representa 470 menos que en ejercicio precedente y equivale, en términos relativos, un 5,75% menos.
Esta evolución a la baja de los accidentes leves coincide, además, con un periodo en el que el número de trabajadores protegidos creció en 1.397 al alcanzar la cifra de 244.118, la más elevada de los últimos cinco años, según los datos publicados por el Invassat.
El cruce de ambos datos da como resultado el índice de incidencia de la siniestralidad, es decir, cuántos percances se producen en la provincia de Castellón por cada
100.000 trabajadores. Este indicador se ha reducido en un 3,3%, más de dos puntos por debajo del limitado descenso en el número de casos en términos absolutos.
EL CONTEXTO En la Comunitat, hubo un total de 52.148 accidentes con baja en jornada de trabajo, con una disminución de 830 casos en relación con el mismo periodo del año anterior y que representa una reducción del 1,6%. En lo que respecta a los sectores, hubo 2.757 casos en la agricultura; 11.285 en la industria; 8.125 en la construcción y 29.981 en los servicios.