Rueda envía a su portavoz parlamentario al primer debate contra el BNG y el PSOE
El PP, con su candidato ausente, culpa a Sánchez de la crisis industrial
La campaña del 18-F empezó con una ausencia. El primer debate entre PP, BNG y PSdeG-PSOE, un encuentro organizado ayer por EL PAÍS y la Cadena SER entre las tres fuerzas con representación parlamentaria, sirvió de pistoletazo de salida pero sin que se presentara el aspirante a la reelección. Alfonso Rueda envió a su portavoz parlamentario y número seis de la candidatura de Pontevedra, Alberto Pazos, para enfrentarse a Ana Pontón y José Ramón Gómez Besteiro. Para la nacionalista, es “una falta de respeto a la ciudadanía”. Para el socialista, “el principal problema de Galicia: un Gobierno ausente”. “La agenda de un presidente-candidato siempre resulta complicada”, intentó excusar Pazos.
El debate, moderado por el jefe de Informativos de la Cadena SER en Galicia, Ricardo Rodríguez, fue intenso, por momentos revuelto y enredado en continuas interrupciones. Pontón y Besteiro hicieron piña contra el enviado de Rueda, sin apenas choques entre ellos. Pazos dibujó una Galicia a la vanguardia de España en sanidad y educación. El sistema sanitario está entre los que reciben una puntuación más alta y el educativo, es “el mejor” del Estado y el “más inclusivo” de la OCDE, defendió, y culpó al Gobierno central de la crisis industrial: “Son los grandes boicoteadores de la industria gallega”. Pontón acusó al PP de “llevar demasiado tiempo instalado en la propaganda” y le reprochó la falta de médicos y pediatras, las esperas para una cita en atención primaria y el cierre de escuelas en las zonas rurales. Besteiro ironizó: “Tenemos menos empleo y menos población. Sí, sí, vamos como un tiro”.
Pontón acusó a los populares de “hacer negocio con la vejez” por la falta de residencias de gestión pública en Galicia, y el enviado de Rueda utilizó el reproche de la nacionalista para atacar a Besteiro, que entre 2007 y 2015 fue presidente de la Diputación de Lugo, una administración que sigue en manos de los socialistas.
Los representantes de PP, BNG y PSOE se enzarzaron al hablar de política industrial. El candidato socialista destacó el anuncio que lanzó Pedro Sánchez, hace solo unos días de que Navantia construirá un nuevo buque en los astilleros de Ferrol que generará 1.800 empleos, y prometió que si preside la Xunta, conseguirá el “impulso” del Gobierno central para Galicia. Pontón, por su parte, se presentó como una candidata “con las manos libres” a la que “no darán órdenes desde Madrid ni unos ni otros”. “Ni le dan órdenes ni le hacen caso”, le espetó el representante del PP.
Pontón y Besteiro eludieron responder a la pregunta del moderador sobre si pactarán una coalición de izquierdas en caso de que Rueda pierda la mayoría absoluta. Rodríguez le formuló idéntica cuestión a Pazos en relación con la posibilidad de que Vox o Democracia Ourensana (DO) entren en el Parlamento gallego y sean necesarios para que los populares retengan el poder. “Nosotros no vamos a pactar con nadie”, proclamó el representante del PP. “¿Como en Ourense?”, apostilló Pontón en alusión al acuerdo que aupó en 2019 a Gonzalo Pérez Jácome, líder de DO, a la Alcaldía de la capital provincial para que los populares no perdieran la Diputación. “¿O como en Castilla y León [con Vox]? ¡Qué credibilidad!”, exclamó la nacionalista.