Hezbolá lanza su mayor ataque a Israel desde que empezó la guerra
El ministro de Defensa israelí afirma que están “más cerca que nunca” de liberar a los rehenes en Gaza
La milicia chií disparó 200 cohetes y 20 drones y causó la muerte de un soldado
Netanyahu comunica a Biden el envío de una delegación a Qatar para negociar
En medio del constante sonido de las alarmas en el norte de Israel, la guerrilla chií Hezbolá llevó a cabo ayer el que está considerado el mayor ataque contra su vecino del sur tras casi nueve meses de guerra. Al mismo tiempo, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, reconoce que están “más cerca que nunca” de liberar a los rehenes que permanecen en la franja de Gaza, donde ya son más de 38.000 los muertos por ataques israelíes.
De hecho, el primer ministro Benjamín Netanyahu convocó anoche a su gabinete de seguridad para abordar la propuesta presentada la víspera por los fundamentalistas palestinos a Qatar, Egipto y Turquía. El primer ministro israelí mantuvo una conversación telefónica con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, en la que le hizo saber que va a enviar una delegación para avanzar en las negociaciones.
En total, Hezbolá lanzó unos 200 cohetes y una veintena de drones. Pese a la contundencia de la ofensiva, dejó una sola víctima mortal, un soldado en los Altos del Golán —territorio sirio ocupado por Israel—. Se trata de uno de los miles de reservistas israelíes que están desplegados desde hace meses en torno a la frontera en previsión de una guerra de alta intensidad que pueda llevarlos a invadir Líbano. En las últimas semanas, el Estado israelí ha reforzado ese despliegue y prepara a sus hombres en maniobras especiales.
La guerrilla confirmó el ataque y señaló que fue en respuesta al asesinato selectivo que Israel llevó a cabo el miércoles en la ciudad libanesa de Tiro contra Muhammad Nimah Nasser, un alto mando del grupo. Hezbolá aprovechó el funeral de Nasser para lanzar nuevas amenazas contra Israel. “Continuaremos apuntando a nuevos sitios que el enemigo no imagina que podrían ser atacados”, dijo Hashem Safieddine, un alto cargo del grupo proiraní, durante la ceremonia, informa Al Jazeera. En respuesta, Israel bombardeó desde el aire distintas posiciones de la guerrilla.
Los sistemas antiaéreos israelíes interceptaron parte del ataque, que dejó, además, algunos daños materiales. Lo que no se puedo evitar fue que decenas de espacios abiertos acabaran siendo pasto de las llamas. Hasta 40 unidades de bomberos apoyados por 10 aviones trataban de combatir las llamas avanzada la tarde de ayer en diferentes puntos del entorno de la frontera en los que cayeron los proyectiles y los aviones no tripulados. Una carretera permanece cortada por el fuego, según el diario Yedioth Ahronoth.
Negociaciones
Si en el norte no hay señales de que las partes enfrentadas caminen hacia un enfriamiento de conflicto, en Gaza, principal escenario de la guerra, florece cierta esperanza en la arena diplomática, pese a que, sobre el terreno, se mantienen los ataques de las tropas de ocupación en diferentes zonas de la Franja. Hamás podría, por primera vez, aceptar avanzar en un alto el fuego cediendo a su exigencia de que eso suponga el fin total de la guerra.
El ministro de Defensa, Yoav Gallant, le comunicó a las familias de los rehenes secuestrados en Gaza desde el 7 de octubre, día que comenzó la guerra, que Israel está “más cerca que nunca” de lograr un acuerdo para poner fin al cautiverio, informa The Times of Israel citando al Canal 12. “Hace un mes era pesimista sobre nuestras posibilidades de llegar a un acuerdo en el corto plazo. Uno de mis principales objetivos en todas mis reuniones en Estados Unidos fue presionar a Hamás para que llegara a un acuerdo”, ha comentado. “Hoy, y lo digo con cautela, estamos más cerca que nunca”, ha reiterado. Desde octubre, solo se ha conseguido amarrar una semana de tregua. Fue la última de noviembre, cuando fueron liberados más de 100 de los 250 rehenes.