Un 45% de los hosteleros en España volverá a subir los precios en verano
Es el sector con más dificultad para cubrir vacantes, junto a la construcción y el campo
El 45% de las empresas de hostelería (alojamientos y restauración) tiene previsto volver a subir los precios este verano, lo que convierte a este sector en el que liderará los incrementos de precios en el país en el tercer trimestre, según la Encuesta del Banco de España sobre la Actividad Empresarial (EBAE) publicada ayer.
En lo que va de año se ha observado una «moderación» en la evolución de los precios de venta, ya que en el segundo trimestre (de abril a junio) sólo una de cada cuatro compañías han elevado sus tarifas en el país, pero para el tercero todo señala a «un ligero repunte». Este, no obstante, variará mucho en función de los sectores de actividad, siendo aquellos que esperan un mayor dinamismo en su facturación los que más tienen previsto incrementarlos. «Casi un 45% de las empresas de la hostelería esperan subir sus precios de venta en el próximo trimestre, mientras que este porcentaje se reduce al 17% en los servicios inmobiliarios», apunta el supervisor.
El tirón de la demanda de la época estival y las excelentes previsiones del sector turístico tanto nacional como extranjero dispararán la facturación de los hosteleros, que ya han sido en el segundo trimestre los que han experimentado un mayor aumento de las ventas: del 0,31%, tres veces más que la media. Estos buenos resultados les animarán a subir precios sin miedo a perder clientes, a pesar de que se espera que los costes avancen con más moderación en lo que queda de año.
El buen comportamiento del sector le ha permitido ser también el que más ha reforzado su plantilla en términos porcentuales en el último trimestre; de hecho, la mitad de las compañías admiten que tienen problemas para cubrir vacantes.
«El porcentaje de empresas que perciben problemas de disponibilidad de mano de obra alcanza el 41,1%, apenas 2 puntos porcentuales menos que hace tres meses, proporción que supera, por primera vez en la serie, al impacto del incremento de los costes energéticos. Por sectores de actividad, los problemas continúan siendo especialmente marcados en la hostelería, la agricultura y la construcción, donde más del 50% de las empresas declaran que se están viendo afectadas. Esta heterogeneidad sectorial es importante para comprender las diferencias en las expectativas de costes laborales a medio plazo, ya que las ramas en las que se observa una mayor incidencia de estos problemas de mano de obra tienden a coincidir con las que anticipan mayores incrementos de sus costes laborales», señala la institución. Al haber pocos candidatos disponibles para cubrir las vacantes, las empresas se ven obligadas a subir sueldos para captarlos y retenerlos.
Por segundo trimestre consecutivo, la incertidumbre sobre la política económica es el principal determinante de la actividad empresarial, por debajo del coste de los inputs energéticos, que hasta ahora era el mayor problema para las compañías. Aunque la incertidumbre sobre la política ha bajado respecto al trimestre anterior, todavía un 49% de las empresas en España lo identifica como el principal factor condicionante de su actividad. «La incidencia de este factor es bastante generalizada por ramas de actividad, y son las ramas de agricultura, industria y comercio las que señalan una mayor afectación (62%, 58% y 54%, respectivamente), en contraste con el menor porcentaje de compañías afectadas en los servicios de información y comunicación (36%)», señalan.
Con todo, en términos generales, las empresas han experimentado «un marcado aumento de la facturación» en el segundo trimestre, después de los descensos de los tres trimestres anteriores, aunque se mantiene una elevada heterogeneidad sectorial. En concreto, el porcentaje de empresas encuestadas cuyas ventas han aumentado en este período es del 32,3%, 10,1 puntos porcentuales más que en el trimestre anterior; mientras que el porcentaje de las empresas que perciben descensos en su facturación ha bajado al 20,6%, 8,3 puntos menos que hace tres meses. «Las perspectivas para el tercer trimestre del año se mantienen positivas y apuntan a una continuación en el avance de la facturación empresarial», recogen.