El choque entre Taqa y Criteria frustra la OPA sobre Naturgy
L El holding de La Caixa rechazó el intento final del grupo emiratí de hacerse con el 51% de la empresa relegando a Fainé
C. SEGOVIA / F. PASCUAL MADRID El choque final entre el grupo estatal emiratí Taqa y Criteria, el brazo inversor de La Caixa, ha frustrado la que se perfilaba como la Oferta Pública de Adquisición de Acciones (OPA) del año por un valor superior a los 25.000 millones de euros.
La operación quedó abortada este lunes, como informó EL MUNDO, tras la negativa final de Taqa a rebajar exigencias rechazadas por Criteria. Según aseguran a este diario fuentes conocedoras de la negociación, el detonante final fue la pretensión del grupo que preside el propio ministro de Inversiones de Emiratos, Mohamed Hassan AlSuwaidi, de cambiar condiciones de modo que se aseguraba a medio plazo el control del 51% de Naturgy, dejando a Criteria Caixa el 49% como comparsa.
El presidente de Criteria, Isidro Fainé, y su consejero delegado, Ángel Simón, rechazaron esa posibilidad y plantearon volver a un control conjunto que era el enfoque original de la OPA.
Taqa ofrecía asumir el 51% dentro de varios años, de modo que fuera más fácil de digerir para Criteria, pero la negativa de esta última fue firme.
En consecuencia, el consejo de administración de Taqa, que preside el propio ministro, descartó buscar otras fórmulas más equilibradas y Criteria se vio obligada a reconocer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores –tras publicar EL MUNDO la noticia– que «las negociaciones se han dado por finalizadas al no haber prosperado un acuerdo de socios para dar estabilidad al accionariado de Naturgy».
Es probable que el Gobierno hubiera terminado rechazando que Taqa asumiera el control de la primera gasista de España, pero no llegó a intervenir, según las citadas fuentes, porque Criteria se plantó previamente. La jornada fue larga, porque los fondos GIP y CVC, que controlan el 40% de Naturgy, querían finalmente la OPA para poder revender sus títulos con fuertes plusvalías. «Ha habido fuerte presión de los fondos sobre Criteria para que aceptara las condiciones de Taqa, pero sin éxito, porque La Caixa no está para que otros hagan caja, sino para hacer operaciones que tengan sentido industrial y para la obra social», según fuentes próximas a la entidad que preside Fainé. En contraste, fuentes próximas a los fondos critican, por su parte, que Simón hubiera llegado tan lejos en la negociación con el consejero delegado de Taqa, Jasim Husain Thabet, sin cerrar aspectos básicos.
En las largas semanas de negociación hubo tensiones también con CVC, el fondo que dirige en España Javier de Jaime, pero en el entorno de este grupo niegan que éste haya tenido responsabilidad en el mal desenlace reclamando subidas de precio.
¿Y ahora? «CriteriaCaixa continuará explorando alternativas que permitan asegurar el proyecto industrial de Naturgy y acelerar su crecimiento, mediante opciones que den estabilidad al accionariado de la compañía, y que permitan a CriteriaCaixa mantener su posición como socio español de referencia en la empresa», según el comunicado del primer holding inversor del país. La posibilidad de retomar negociaciones con Taqa se presenta ya remota tras la tensión final y el problema es que al menos los dos citados grandes accionistas, CVC y GIP, se encuentran ya al límite del período que suelen permanecer en una compañía. Su 40% es inestable y, por eso Criteria buscó como solución un socio industrial con recursos como es el fondo emiratí.
Las conversaciones iniciales apuntaban al lanzamiento de una OPA conjunta desde vehículos distintos para hacerse con el 100% del capital. Criteria ya posee el 26% y estaba dispuesto a incrementar su participación equilibrándola con la de Taqa. Ambos iban a colocar siete consejeros, de modo que cada parte nombraba tres y designarían el séptimo de mutuo acuerdo. La continuidad del presidente de Naturgy, Francisco Reynés, no quedaba en cuestión y éste alla- nó el acuerdo renunciando a un bonus multimillonario el pasado
22 de abril. La OPA le facilitaba cobrarlo e iba a ser muy controvertido, con lo que Reynés renunció.
La vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, dio un visto bueno informal a la OPA siempre que fuera conjunta y que no supusiera sacar de Bolsa a Naturgy de forma definitiva. Las partes se comprometían a que, incluso si se hacían con el 100% del capital, devolverían a corto plazo una parte al mercado para dotar al valor de una liquidez de la que ahora carece. Quedaba la incógnita de un tercer fondo importante en el accionariado, el australiano IFM, que entró a más alto precio que GIP, y CVC no tenía el incentivo de vender, pero podía quedarse a esperar mejores tiempos.
Tanto Ribera como el ministro de Economía, Carlos Cuerpo,efectuaron declaraciones favorables a la operación. No descartaron que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi) terminara tomando una participación minoritaria, pero sin la rotundidad que sí ha expresado el Gobierno en Telefónica desde la entrada de la saudí STC con hasta un 9,9% del capital.
Los fondos quedan ahora expectantes sobre el futuro de Naturgy y CriteriaCaixa se limita a «reiterar su compromiso como inversor de largo plazo con el proyecto industrial de Naturgy, de la que es primer accionista desde hace décadas, y reitera su voluntad de defender los intereses de la compañía energética». Las acciones cerraron a 24,86 euros con ligera subida antes de que trascendiera la ruptura.