Planes de verano para disfrutar de las estaciones de esquí españolas
Subirse ahora a sus telecabinas y telesillas lleva a descensos con bicicleta, senderismo con vistas, actividades para iniciar a los niños en la montaña, parques de aventura o un trineo por carriles
Las estaciones de esquí españolas no son solo para el invierno. Desaparecida la nieve de sus laderas, vuelven a abrir parcialmente sus instalaciones para ofrecer planes de verano en la montaña. De la Cordillera Cantábrica a Sierra Nevada, pasando por el Pirineo, 13 remontes se vuelven a poner en marcha, ahora para subir a ciclistas, caminantes o a quienes simplemente quieren tener buenas vistas desde las alturas sin hacer grandes esfuerzos. La variedad de actividades disponibles convierten a algunas de estas estaciones en parques de atracciones en plena naturaleza, ideales para pasar unos días en familia.
En la Cordillera Cantábrica, dos remontes reabren en las estaciones de este macizo montañoso. Manzaneda, en Ourense, único centro invernal de Galicia, ya tiene en marcha sábados y domingos el telesilla que enlaza la base del complejo con la cota más alta a 1.800 metros. Desde lo alto, los bikers pueden lanzarse por 10 pistas preparadas para el descenso con bicicleta. Los senderistas utilizan también el remonte para pasear por las zonas más altas o simplemente subir a disfrutar de las vistas. Hay un bike park para niños, tirolina, piscina, spa y golf.
El telecabina Cuitu Negru de Valgrande-Pajares, en el Principado de Asturias, se inauguró la temporada pasada para dar servicio en invierno y verano y ya está en marcha desde el pasado 15 de junio. La estación propone hasta 11 rutas de senderismo, algunas guiadas, para conocer la biodiversidad de la zona, como la que parte del telecabina y recorre la cresta de la montaña durante unos dos kilómetros. Los ciclistas pueden bajar por cinco trazados hasta la base. Hay posibilidad de alquilar bicicletas, casco, rodilleras y peto protector. Se organizan también campamentos para niños de 8 a 16 años a partir de 420 euros.
En el Pirineo aragonés, ya es un clásico desde hace muchos años. Astún, en el valle del río Aragón, en la provincia de Huesca, ha abierto desde el 29 de junio el telesilla Los Lagos. Sube a más de 2.000 metros y facilita el acceso a los ibones de Truchas y Escalar, en España, y a los franceses de Casterau, Bersau, Gentau, Miey y Roumassot. Si se quiere ver los siete lagos, atravesando la frontera, hay que contar unas cinco horas de caminata. Hay terraza y bar en el final del remonte con vistas extraordinarias de Candanchú y el pico Aspe.
Panticosa y Cerler tienen todo el encanto de ser estaciones-pueblo, con remontes y pistas que arrancan y terminan en el casco urbano. En Panticosa, en el valle de Tena, el telecabina conecta el pueblo con el corazón de la estación a 1.900 metros de altitud, donde la terraza y restaurante están abiertos. Desde allí se accede por pistas y senderos fáciles hasta los ibones de Sabocos y Asnos, los picos Mandilar y Faceras y el mirador de Yandel, a solo 35 minutos de marcha. Los bikers disponen de cuatro descensos, uno de ellos fácil aunque largo (3,2 kilómetros y 700 metros de desnivel) y otro solo para expertos, escenario del campeonato de España de Downhill en 2021. Vale mucho la pena la excursión que rodea todo el macizo de la estación por el valle de La Ripera, primero a bordo de un trenecito, luego caminando, para terminar bajando en el telecabina; una excursión de 4 horas y 45 minutos en total.
Pequeños Gigantes es el programa que ofrece Cerler, en el valle de Benasque, para iniciar a los niños en la montaña. La cita es los martes y sábados a las diez de la mañana en la estación de salida del telesilla El Molino en el pueblo. Los adultos se pueden apuntar a excursiones guiadas para subir al mirador del Cielo, Cogulla y Collado de Sarrau en diferentes días y con distinta dificultad. Hay tres bajadas para bicicletas –una de ellas hasta Benasque– y la gran Ruta 30, que enlaza la cumbre del Rincón del Cielo con los pueblos de Sesué o Castejón de Sos con un descenso de 1.350 metros. La subida en el telesilla permite ver las dos cumbres más altas de la cadena: Aneto y Posets. El 31 de agosto está prevista la celebración de la fiesta del cordero con el reparto de 300 raciones.
En el Pirineo catalán, Baqueira Beret, la estación del valle de Arán en Lleida, abre dos telesillas: uno en Baqueira 1.500, El Bosque, y otro en Beret, Clòt der Os. Entre ambos permiten acceder de forma cómoda a cinco rutas senderistas y a 11 descensos en BTT. De los paseos a pie, el más largo es el que lleva hasta los lagos de Clòt der Os, casi tres kilómetros de marcha. Con bicicleta se puede bajar desde Beret hasta 1.500, algo más de cuatro kilómetros, o estrenar el nuevo trazado Telesèra que enlaza la cota 1.800 con la base por debajo del telesilla El Bosque, entre otros recorridos. Este verano estarán abiertos los restaurantes Pla de Beret y La Borda Lobató y el bar Baqueira 1.500 a pie de pistas. La central de reservas gestiona el alquiler de bicicletas eléctricas y convencionales, las rutas guiadas a pie o en motos eléctricas, los alojamientos y otros servicios.
Rutas para conocer la fauna
La Molina, entre las comarcas de la Cerdanya, el Ripollès y el Berguedà, en Girona, tiene el bike park más grande de la Península con 12 itinerarios de descenso, un circuito de cross country y un divertido wood park para Enduro de BTT. Están abiertos el telesilla Cap de Comella y el telecabina Tosa d’Alp a 2.537 metros, punto de partida para excursiones guiadas por los circuitos de Las Minas y de la Fauna. Hay multitud de actividades diferentes disponibles: kayaks, bicicletas, patinetes acuáticos en el lago, paseos en segways, parque de aventura en los árboles, bajadas en tubbing y rutas para conocer la fauna pensadas para niños.
Vall de Núria es una estación activa los 365 días del año situada en el parque natural de las Cabeceras del Ter y del Freser (Girona) y accesible solo por tren de cremallera. El billete da derecho a utilizar el teleférico Coma del Clot, que sube hasta los 2.121 metros junto al mirador del Pic de l’Àliga, desde donde parten diversas rutas senderistas. Se puede disfrutar de barcas y canoas en el lago, paseos a caballo o poni, excursiones nocturnas, minigolf, sesiones de yoga y observación astronómica y siete recorridos por lugares de interés arqueológico. En la misma estación hay también hotel y apartamentos. El teleférico está abierto los fines de semana hasta el próximo mes de octubre.
La estación más mediterránea del Pirineo catalán es Vallter, en la provincia de Girona, emplazada en el circo de origen glaciar Morens-Ull de Ter. La apertura del telesilla que sube a 2.535 metros facilita la visita al nacimiento del río Ter en 20 minutos de agradable paseo. Los sábados de agosto se realizarán excursiones guiadas gratuitas para conocer la fauna y la flora del parque natural de las Cabeceras del Ter y del Freser.
Otras estaciones del Pirineo catalán como Boí Taüll, en Lleida, y Masella, en Girona, acogen también visitantes en verano con actividades en la naturaleza o en sus instalaciones, pero sin la apertura de remontes mecánicos.
En Sierra Nevada lo que diferencia a la estación granadina del resto es su gran altitud: 3.398 metros en la cumbre del pico Veleta, a donde además se puede llegar con poco esfuerzo. Este verano estarán abiertos el telecabina Al Andalus, desde la base en Pradollano hasta Borreguiles, y a continuación el telesilla Veleta, que sube a 3.000 metros. Para alcanzar esta cumbre, la segunda más alta de la sierra, hay disponible una excursión guiada. En el entorno de la estación se despliegan 11 rutas para bicicletas; una de ellas sigue el trazado utilizado en el año 2000 para el Mundial de BTT.
Sin necesidad de coger remontes, Mirlo Blanco es el gran centro de actividades para familias y niños. Especialmente el trineo por carriles, una especie de montaña rusa en descenso. Hay también toboganes con roscos, deslizantes, bicipatín, karts sin motor, camas elásticas y tirolinas. En Sierra Nevada se encuentra además el observatorio astronómico más alto de Europa, que se puede visitar el 27 de julio y el 3 y el 17 de agosto. En colaboración con el CAR (Centro de Alto Rendimiento) se organizan campamentos para jóvenes deportistas desde 710 euros según la duración y la especialidad.
Por último, dentro del Sistema central quizá el gran atractivo de la estación de La Pinilla, en la provincia de Segovia, sea su cercanía a Madrid capital: cien kilómetros y una hora de viaje en coche. Todos los fines de semana, incluidos los viernes y días festivos, pone en marcha el telesilla que da acceso a un extenso bike park con 18 descensos de diferentes dificultades en plena sierra de Ayllón. Hay posibilidad de alquilar las bicicletas y los elementos de protección. Una zona multiaventura ofrece recorridos en moto, quad y bicicleta eléctrica, así como también tirolinas y paintball, entre otras cosas.