STC anuncia dividendos por 1.700 millones y presume de su entrada en Telefónica
Saudi Telecom Company (STC), operadora controlada por el fondo soberano de Arabia Saudí, y principal accionista de Telefónica a la espera de la autorización del Gobierno español, anunció ayer dividendos multimillonarios, por un importe conjunto de casi 6.800 millones de riales (más de 1.730 millones de euros), además de volver a presumir de su entrada en la operadora española.
De esta forma, STC anunció el pago de un dividendo especial con cargo a 2023 por un importe de un rial por acción, que supondrá un desembolso de 4.984 millones de riales (unos 1.230 millones de euros). Además, dentro de su estrategia de los últimos años, la operadora distribuirá un dividendo interino de 0,40 riales por acción, con un desembolso total de 1.993 millones de riales (casi 494 millones de euros).
El anuncio coincidió con la presentación de las cuentas de 2023, ejercicio en el que STC registró unos ingresos de 72.300 millones de riales (unos 17.900 millones de euros), cifra que supone un crecimiento del 7,3% con respecto al año anterior, si bien por debajo de las previsiones de los analistas. En términos netos, la teleco elevó el beneficio un 9,2%, hasta 13.300 millones de riales, también por debajo de las estimaciones.
Olayan Alwetaid, consejero delegado de STC, destacó los éxitos de la compañía durante 2023 tanto en el mercado regional como por las adquisiciones estratégicas llevadas a cabo en los mercados internacionales, dentro de su política de crecimiento. El ejecutivo presumió de la compra de un 9,9% del capital de Telefónica, por 8.500 millones de riales (cerca de 2.100 millones de euros), anunciada a principios de septiembre. STC adquirió un 4,9% en acciones y otro 5% a través de derivados. Para superar la cota del 5%, la compañía debe recibir permiso del Gobierno español, dado el carácter estratégico de la teleco en el ámbito de la defensa y la seguridad nacional.
La entrada de STC en Telefónica, igualmente, supuso la ruptura del statu quo de la compañía, al superar la participación de BBVA y CaixaBank, históricos miembros del núcleo duro. De momento, y merced a su presencia directa del 4,9% del capital, el grupo saudí percibió cerca de 42 millones de euros por el dividendo de 0,15 euros por acción abonado por Telefónica en el mes de diciembre.
En esta sucesión de movimientos, el Gobierno español autorizó a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) para adquirir hasta un 10% del capital de Telefónica, que supondrá el retorno del Estado a la operadora, tras la privatización definitiva en 1997. Además, de llegar a esa posición, pasaría a ser el primer accionista. En cualquier caso, tanto SEPI como STC tendrán derecho a pedir representación en el consejo de administración.
La operadora saudí eleva sus beneficios un 9,2% y un 7,3% sus ingresos
Destaca su presencia en el grupo español en todas sus presentaciones con inversores