«Mis aspiraciones políticas acaban en Andalucía»
▸ Asegura que la tasa turística solo se adoptaría si hay acuerdo con alcaldes y empresarios
—Superado el cabo de Hornos del ecuador de la legislatura, se ve en lontananza las elecciones de 2026. ¿Va a ser candidato? En caso afirmativo, ¿quién cree que será su rival en el PSOE?
—Salvo cuestión de fuerza mayor de salud, voy a ser candidato, porque tengo la responsabilidad de un proyecto empezado hace cinco años y medio y que queremos culminar. Hay proyectos como el metro, el tercer hospital de Málaga, el valle del hidrógeno verde en Huelva o Cádiz, las reformas en el sector de la vivienda o en el ámbito de la empresa… todo eso va a dar su fruto. Respecto al PSOE, soy muy respetuoso, no sé quién va a ser el candidato.
—Varios dirigentes de su partido defienden la tasa turística. ¿Es partidario de un impuesto al turismo que repercuta en las ciudades?
—Hay mucho ruido al respecto. A veces se piensa que es la panacea de todos los males, y no deja de ser una tasa. Una tasa que ponemos a todos los andaluces, porque cualquiera que vaya a otra ciudad va a tener que pagar un impuesto, y eso a mí, como liberal, no me parece lo más interesante. Es cierto que los alcaldes y alcaldesas lo reclaman como herramienta para la modernización y mejora de infraestructuras básicas para el turismo en su ciudad, y habrá que estudiarlo. No me opongo frontalmente, pero prefiero que la decisión sobre la tasa turística venga precedida por un gran acuerdo entre alcaldes y alcaldesas y empresarios.
—Usted agotará el mandato. ¿Cree que Sánchez lo hará?
— Sánchez no va a agotar el mandato porque no gobierna. Piense usted que en un año que llevamos de legislatura solo ha aprobado una Ley, la de Amnistía. Y sale derrotado en el Congreso y en el Senado. Es un gobierno débil y errático que sobrevive con la respiración asistida del independentismo más radical. Ni en los mejores sueños del independentismo podían imaginar un aliado como Sánchez. Pero eso no va a poder aguantar más. Además creo que en el PSOE más pronto que tarde tendrá que salir algunas voces antes de que su proyecto político quede arruinado por la ambición de una sola persona. Tenemos un presidente arrinconado por las sospechas de corrupción y por el independentismo que no gobierna, solo sobrevive.
—¿Ayuso y usted representan las dos almas del PP?
— El PP tiene un único proyecto político liderado por Alberto Núñez Feijóo, que estoy convencido de que será presidente del Gobierno, pero es un partido diverso y plural como la propia sociedad española. Dentro de esa pluralidad, hay dirigentes con enfoques distintos o sensibilidades diferentes pero eso, lejos de obstaculizar el partido, lo que hace es enriquecerlo.
—¿Se ve jubilándose de la política como presidente de la Junta? — Mis aspiraciones políticas acaban en Andalucía, y eso ocurrirá cuando los andaluces decidan. No estaré muchos más de lo necesario para consolidar el cambio en Andalucía.