Putin viaja a Corea del Norte para fortalecer su alianza con Kim Jong-un
▸ El Kremlin quiere que su aliado se una a la construcción de un frente anti-Occidente
Vladímir Putin viajó ayer a Corea del Norte para reunirse con Kim Jong-un, quien lo recibió de madrugada en el aeropuerto. Se trata de la primera visita del líder ruso en 24 años, evidencia del recrudecimiento de su política exterior tras la invasión de Ucrania, plasmado en su pretensión de levantar un frente autoritario ante Occidente.
Su viaje anterior, el primero y único hasta hoy, se produjo en julio de 2000, apenas dos meses después de su nombramiento oficial como presidente. De aquella su anfitrión fue Kim Jong-il, padre del actual líder, entonces un adolescente de apenas 16 años. La cumbre sirvió para reconducir la relación bilateral tras las diferencias con Yeltsin.
Desde entonces los lazos se mantuvieron estables aunque moderados, con Rusia condenando de manera recurrente en el seno de Naciones Unidas los ensayos balísticos norcoreanos, hasta que la guerra provocó un vuelco. Rusia, marginada por la comunidad internacional, se convirtió en un Estado paria a niveles solo comparables a Corea del Norte, lo que facilitó un entendimiento forzoso por falta de alternativas. El régimen de Kim, de hecho, supone junto a Irán uno de los pocos países que suministra armamento militar para su empleo en Ucrania, y su depauperada economía tiene muy poco más que ofrecer que su anticuado pero copioso arsenal.
Ambos países han negado públicamente dichos intercambios, pero en la última reunión entre Putin y Kim, celebrada en septiembre del año pasado en Vladivostok y en el cosmódromo Vostochni, decidieron incrementar sus lazos militares. Ahora se espera la publicación de un comunicado conjunto, así como la firma de nuevos acuerdos de cooperación con énfasis en cuestiones relacionadas con la seguridad.
Sistema alternativo
El líder ruso se ha comprometido de antemano a apoyar a Corea del Norte ante Estados Unidos. «Washington se niega a implementar acuerdos alcanzados con anterioridad y presenta continuamente nuevas demandas, cada vez más estrictas y obviamente inaceptables», ha denunciado por medio de un texto publicado en la portada del ‘Rodong Sinmun’, el diario oficial del régimen norcoreano. «Rusia siempre ha apoyado y seguirá apoyando a la República Popular de Corea y al heroico pueblo coreano en su oposición a este enemigo insidioso, peligroso y agresivo».
Así, Putin ha adelantado su voluntad de desarrollar un sistema alternativo «que no esté controlado por Occidente» para «resistir de manera conjunta ante sanciones unilaterales ilegítimas». El periódico también ha publicado otros artículos, ensalzando la invasión de Ucrania como «una guerra sagrada de todos los ciudadanos rusos».
La reaccionaria visita será también fugaz, pues se espera que a continuación Putin ponga rumbo a Vietnam, otro de sus aliados tradicionales. El líder ruso afianza así su red de amistades tras acudir el mes pasado a Pekín para entrevistarse con Xi Jinping.