Las constructoras piden destinar 240.000 millones a obra civil
Las principales constructoras españolas reivindican el papel del sector en la economía y piden al Gobierno que la inversión en obra civil vuelva a ocupar el papel relevante que tenía antes del estallido de la crisis inmobiliaria. Un informe realizado por PwC por encargo de la Asociación de Empresas Constructoras y Concesionarias de Infraestructuras (Seopan), que representa los intereses de gigantes como ACS, Ferrovial o Sacyr, calcula una necesidad de infraestructuras para los próximos años por valor de 241.106 millones de euros.
El sector busca así una nueva etapa dorada como la vivida a principios de siglo, hasta que la crisis económica puso fin a la fiesta y las empresas se vieron obligadas a potenciar aún más su negocio fuera de nuestras fronteras. El documento presentado ayer destaca la reducción «drástica» de la inversión en obra civil en la última década y media a pesar de que España dispone ahora del dinero de los fondos europeos de recuperación. El informe señala que en 2022 la inversión pública ascendió a 11.863 millones de euros, un 64,8% menos que los 33.680 millones de euros que se destinaron en el año 2009.
El estudio pone en valor la aportación de la obra civil a la economía española. Según PwC y Seopan por cada millón de euros invertido en obra civil en España se genera 780.571 euros en PIB de forma directa, indirecta e inducida, casi 12 puestos de trabajo a tiempo completo y alrededor de 263.000 euros de retorno fiscal. En 2022, la obra pública contribuyó con 18.532 millones de euros al PIB, recaudó 6.192 millones y sumó un total de 272.875 empleos.