Washington alerta de una posible injerencia de Cuba en las elecciones
▸ En la Inteligencia norteamericana creen que el castrismo trata de dañar a los críticos
La Inteligencia estadounidense ha llegado a la conclusión de que Cuba, junto con otros países, ha intensificado sus esfuerzos para interferir en elecciones norteamericanas, favoreciendo a candidatos que estén en disposición de avanzar políticas favorables a los intereses de la dictadura, sometida a un embargo. Un reciente documento de la Dirección Nacional de Inteligencia de la Casa Blanca afirma que las acciones de injerencia de Cuba fueron «de menor escala y más específicamente dirigidas en comparación con las de China, Irán y Rusia», pero aun así incluyeron operaciones de apoyo y hasta contribuciones a candidatos que consideraban favorables y utilizaron intermediarios en EE.UU. para financiar campañas y ocultar su participación.
En un sonado caso reciente de espionaje, Manuel Rocha, quien fue embajador de EE.UU. en Bolivia, fue condenado en abril a 15 años de prisión por actuar como agente encubierto de los servicios de Inteligencia de Cuba. Rocha se declaró culpable de conspiración para actuar como agente de un gobierno extranjero y de actuar como agente ilegal sin notificar al Gobierno de EE.UU. Los fiscales alegaron que Rocha, de 73 años, había trabajado durante décadas en secreto para Cuba, utilizando su acceso a información gubernamental confidencial para apoyar la misión de recopilación de Inteligencia cubana contra Washington. Durante su juicio, Rocha admitió su culpabilidad y expresó remordimiento.
Recientemente, analistas de Inteligencia de EE.UU. advirtieron de nuevo de que el régimen cubano intentará influir en las elecciones de 2024 en Florida, posiblemente desplegando campañas dirigidas a afectar las elecciones en los niveles estatales y locales. En mayo no se renueva sólo la Casa Blanca sino también toda la Cámara de Representantes y un tercio del Senado, con uno de esos escaños en Florida.
Según reveló la Oficina del Director Nacional de Inteligencia al diario ‘Miami Herald’, ya en 2022 Cuba intentó influir en las elecciones parciales en Florida, conduciendo operaciones de influencia para denigrar a candidatos específicos. Estas actividades
incluyen apoyo a medios estadounidenses críticos con los opositores de Cuba en el Congreso y el uso de redes sociales para amplificar contenido denigrante contra políticos estadounidenses conservadores.
Un informe parcialmente clasificado de diciembre de 2023 asegura que Cuba y otros países adversarios de EE.UU. están analizando qué candidatos les pueden ser más favorables a sus intereses en Washington.
Objetivo: Rubio
Uno de los objetivos constantes de ataques del régimen cubano es el senador Marco Rubio, que está entre quienes Donald Trump considera como opciones para candidato a la vicepresidencia. En mayo, el senador afirmó durante una vista en la comisión de Inteligencia del Senado que Cuba intentó socavar el proceso electoral de EE.UU. en 2022. Rubio destacó que esta influencia extranjera es una preocupación creciente y no se limita solo a las elecciones, sino que también afecta los debates políticos cotidianos en EE.UU. «En algún momento representará un grave peligro de convertirse en algo que no hemos previsto completamente», dijo.
Tras las injerencias de Rusia en las elecciones de 2016, la Inteligencia de EE.UU. ha incrementado el seguimiento de intentos de reventar el proceso electoral en elecciones presidenciales, legislativas y parciales. Aparte de las grandes potencias con capacidad industrial de desinformación, como Rusia y China, EE.UU. ha apuntado, sobre todo en la era de Trump, a Cuba y Venezuela como grandes desestabilizadores con bulos y campañas de influencia política en español.
Después de que un informe parcial de Inteligencia se enviara al Capitolio el año pasado, varios republicanos salieron a denunciar que estaban entre los objetivos de Cuba y otros aliados suyos en campañas de influencia en plataformas digitales. Se trata de los diputados Carlos Gimenez, María Elvira Salazar y Mario Díaz-Balart.
El año pasado, Meta, la matriz de Facebook, informó de que había borrado de sus servidores cientos de cuentas falsas vinculadas al Gobierno cubano y sus instituciones que estaban publicando propaganda en Facebook e Instagram y atacando a críticos dentro de Cuba y en EE.UU. ocultando su procedencia.
Las páginas de Facebook detectadas tenían más de 650.000 seguidores, y los grupos contaban con la participación de 510.000 cuentas. El ‘Miami Herald’ informó previamente sobre un esfuerzo por exponer cientos de cuentas falsas que estaban publicando propaganda cubana en Twitter, actualmente X.
Un informe que ha sido desclasificado recoge un aumento de la injerencia cubana en las elecciones parciales de 2022