Qué constitucionalismo en Cataluña
SIEMPRE AMANECE
Si a Illa lo han votado los independentistas es porque el sanchismo ha asumido sus posiciones
SOBRE las nueve se apareció una foto de Emilio Morenatti tomada en la sede del PSC en la que aparecen Jaume Collboni, el ínclito Manuel Castells y Salvador Illa en ese momento de las noches electorales en las sedes de los partidos en el que la gente no usa tenedor y deja las cortezas de las cuñas de queso sobre las carpetas. Hay nervios y comida cocinada en recetas que una vez servidas resultan descabelladas. Nadie ha tocado el plato de lo que parecen pimientos rellenos: ¿Quién podría comerse uno en ese momento? ¿A quién se le ocurrió que el candidato podría comerse un pimiento relleno? ¡Un pimiento relleno sin salsa! Ah, ahí están las soledades de los pimientos y de la suma tambaleante de un tripartito de izquierdas que va y viene según avanza el escrutinio. Con todo, el Salvador sonríe su victoria en el sofá y mira una pantalla que no aparece en la foto, pero que se intuye. El candidato de Sánchez está contento, instalado en esa alegría suya, un optimismo satisfecho, relajado, sonrojado por el esfuerzo y desfogado de algo en ese estado como de mi prima cuando sale del pádel. Al cierre de esta columna lo imagino pronunciando los discursos de la victoria en los que el sanchismo ha logrado –¿lo veis?– apaciguar el ímpetu de los independentistas convencidos ahora de que la independencia de Cataluña era poco menos que una ida de olla y que Sánchez los convenció. Por los caminos de la noche se vienen los soldados del pedrismo a pregonar este nuevo tiempo en el que la suma del independentismo pierde diez puntos. Creer que los independentistas son ahora menos que los constitucionalistas necesita convenir que el PSC sigue siendo constitucionalista, y yo diría que no.
Si al PSC lo han votado los de ERC es porque el sanchismo se ha convertido en una sucursal de ERC. Si topan el precio de la vivienda, si dejan a la Corona en canicas, si prometen retorcer la Constitución hasta darle cualquier forma en la que quepa una Cataluña asociada como si mi Españita fuera un club de golf. Si no asiste a los niños de Canet que quieren educarse en castellano, si al cabecilla del ‘procés’ lo va a traer a España con escolta de la Guardia Civil. Digo que si a Illa lo han votado los independentistas es porque ha asumido sus posiciones.
¡Así cualquiera! Yo a estas horas me planteo que, más que el sanchismo conquistando al independentismo, lo que vemos es cómo el independentismo conquista al PSOE en la medida en que ha asumido el relato del ‘procés’, del ‘lawfare’, las cloacas del Estado policial y judicial corrupto, los medios que emiten bulos. Asumen la versión por la que España fue un país que oprimió y reprimió a los catalanes y encarceló a sus líderes injustamente por acción de un Estado apartado de los mínimos estándares democráticos. El constitucionalismo ha conquistado terreno del independentismo dejando de ser, justamente, constitucionalista.