El bar que sacó sofás al Salvador: «Necesitaba espacio dentro para la bendición»
▸ El dueño, Antonio Luque, dice que no tuvo intención de incumplir la norma
La aparición de parte del salón de un bar, con las butacas y mesa de diseño además de luces de colores, el pasado martes 6 de febrero en mitad de la plaza del Salvador, ha provocado una gran polémica en las redes sociales. Por ello el propietario del local que sacó ese mobiliario a la calle en la esquina de la calle Sagasta, quiso explicar las razones que le llevaron a ello. Según el dueño del establecimiento, Antonio Luque (que además fue presidente de la Asociación de Hosteleros de Sevilla y Provincia), todo se debió a la necesidad de contar con más espacio para poder organizar el acto de inauguración del citado local.
Luque asegura que había convocado a varias personalidades de la ciudad a la apertura del local, que incluso fue bendecido por el director espiritual de la iglesia del Salvador. Y que para ello necesitaba tener más espacio en el interior del establecimiento. Por eso decidió sacar las butacas para que quedara más hueco dentro.
Sin embargo, según especificó el empresario, volvió a introducir el mobiliario dentro del edificio poco después, con lo que las butacas sólo permanecieron unos 45 minutos en el exterior. Un tiempo en el que ciudadanos que pasaron por allí hicieron fotos y las colgaron en las redes sociales provocando una gran polémica.
Luque recalcó que actualmente tiene licencia para cinco veladores y que fue «un espacio muy pequeño» de la calle el que fue utilizado para instalar las butacas y la mesa y ha insistido en que, como ex presidente de los hosteleros sevillanos, es «el primero» que quiere que se cumplan las normas.
En cuanto a los focos, también sostiene que únicamente se mantuvieron durante el tiempo que duró la inauguración. «No queremos que nadie se moleste», recalcó Luque. En este sentido, también recordó que su establecimiento tiene ocho empleados y que ha realizado una importante inversión en la puesta en marcha del nuevo local, antes ocupado por una zapatería, y que se enclava en un edificio con protección patrimonial.
En cualquier caso este nuevo establecimiento hostelero ya ha recibido la primera sanción de la Gerencia de Urbanismo, que lo expedientó porque no contaba con permiso de obras y carecía también de la licencia de veladores.
La aparición de mobiliario de salón en la plaza del Salvador ha generado una gran polémica y críticas en las redes sociales