El San Cristóbal de la Prioral de Carmona tiene graves filtraciones
▸ Patrimonio autorizó una restauración en febrero de 2020 que aún no se ha ejecutado
La Iglesia Prioral de Santa María, de Carmona, tiene una de las pinturas murales de mayor tamaño de la provincia de Sevilla como es la de San Cristóbal. Sin embargo, la misma se encuentra en un estado de deterioro importante y vecinos y fieles reclaman su restauración por las filtraciones que se llevan acumulando en el muro desde hace años.
La obra es del siglo XVIII, de autor anónimo y está inspirada en otros murales del santo como el que se conserva en la Catedral de Sevilla de Mateo Pérez de Alesio y que está al lado de la tumba de Cristóbal Colón o el del convento de Santa Paula de la capital hispalense que es de una centuria anterior al del municipio carmonense.
Observando la imagen, se puede ver perfectamente cómo las filtraciones de agua no dejan a atacar a las pinturas en la zona de la cabeza del santo y en la del Niño Jesús, el cual apenas se adivina por los desprendimientos de la policromía.
También, en la parte inferior del mural, se ve cómo a partir de las rodillas de San Cristóbal, hay una pérdida de la pintura que llama la atención de los fieles y los visitantes de este templo principal de la localidad donde se encuentra la patrona, la Virgen de Gracia o hay un retablo mayor del siglo XVI.
La historia de la rehabilitación de este retablo viene de lejos porque la Comisión de Patrimonio autorizó en febrero de 2020, un mes antes de la paralización de la sociedad por la pandemia del coronavirus, la actuación sobre esta pintura mural. Sin embargo, no ha habido ningún avance en la conservación de este altar colocado a los pies de la nave del Evangelio de la Iglesia Prioral de Santa María.
Los vecinos consultados por este periódico insisten en la singularidad de esta obra y en que no ha habido movimientos para la actuación sobre este bien. Asimismo, el mural está enmarcado por un retablo-marco de columnas salomónicas de la misma época que la pintura.
Por su parte, ABC de Sevilla se puso en contacto con la Archidiócesis de Sevilla y la Consejería de Cultura sin haber obtenido respuesta sobre si hubiera algún tipo de actuación prevista sobre el mural. Mientras tanto, fuentes del Ayuntamiento de Carmona sí señalaron a este periódico que «conocemos el estado de la pintura pero la misma pertenece a la Iglesia». Además, recordaron que «no se han puesto en contacto con ellos por si se
Hay desprendimientos de policromía en las piernas del santo y en el Niño Jesús, el cual ya es casi imperceptible
pudiera hacer algo pero sí se ve el deterioro de la obra».
Policromías
La Comisión de Patrimonio de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía explicaba en febrero de 2020 que la pintura mural presentaba un estado de suciedad importante en sus estratos superficiales, encontrándose más afectada por las humedades de filtración en la zona de perímetro del ventanal anexo.
Asimismo, advertía que el estado de conservación de la pintura mural y del retablo que la enmarca, está «fuertemente condicionado por unos agentes que ocasionan deterioros diferentes según la naturaleza de los materiales que lo componen».
En aquel año, ya se observaban cuatro grupos de patologías: las derivadas del espacio arquitectónico, las derivadas de la actividad humana, las ocasionadas por la naturaleza de cada material, y las ocasionadas por los elementos circundantes con el resultado en todos los casos de humedad y alteraciones cromáticas en la pintura.
La propuesta de intervención que se aprobó por parte del organismo autónomico y que todavía no se ha ejecutado en el templo de Carmona es un tratamiento para la recuperación de las policromías del retablo mediante la limpieza, una consolidación y fijación de la superficie de la pintura, reintegración de las lagunas y el color, y la aplicación de una capa de protección.
Estas actuaciones se han realizado en otras pinturas murales porque son las que más sufren los efectos que padecen los muros de las iglesias ya que, tal y como sucede en la localidad de Los Alcores, se filtra el agua resquebrajando el mural y cayéndose la capa pictórica mantenida durante siglos. Por ejemplo, en Sevilla, se trabajó sobre el San Cristóbal de la Catedral o sobre la Virgen de Rocamador de la parroquia de San Lorenzo pero la imagen de la Prioral de Santa María necesita cuanto antes una intervención de urgencia para que no se pierda más elementos que forman parte del patrimonio de este municipio.
La obra singular es del siglo XVIII y está inspirada en el mural de la Catedral de Sevilla de Mateo Pérez de Alesio