ABC (Sevilla)

La bebé abandonada tiene restos de sustancias tóxicas Se llamará Nieves por el frío que hacía esa noche

▸ La Guardia Civil busca a los padres biológicos de la niña, que ya está fuera de peligro y en planta

- S. TUBIO/ F. RODRÍGUEZ MURUBE

La bebé encontrada en un contenedor en Los Palacios tiene restos de sustancias tóxicas. La niña, que fue hallada en la noche del pasado lunes y con el cordón umbilical aún colgando en una bolsa en un contenedor en Los Palacios y Villafranc­a por una vecina cuando iba a tirar la basura, presenta restos de sustancias tóxicas en su organismo según confirmaro­n a ABC fuentes de la investigac­ión. Eso significa que esos restos serían compatible­s con una madre consumidor­a de sustancias estupefaci­entes.

La noticia del hallazgo de la pequeña recién nacida y con el cordón umbilical suelto ha causado un gran revuelo y una gran conmoción en toda España. Ayer la consejera de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, de la Junta de Andalucía, Loles López, confirmó que la Guardia Civil está buscando actualment­e a la familia biológica del bebé.

Si la Guardia Civil encuentra a la familia biológica, primero habrá que determinar si ésta quiere hacerse cargo del bebé. En caso contrario, la Junta de Andalucía asumirá su tutela y activará rápidament­e la búsqueda de una familia de urgencia y su adopción.

López aseguró que la vida del recién nacido «no corre peligro», aunque apuntó que llegó al Hospital de Valme, donde permanece ingresada, con síntomas de hipotermia y con «otras cuestiones» sobre las que la consejera prefirió no pronunciar­se. «Veremos cómo evoluciona con todo lo que están encontrand­o los profesiona­les», señaló.

«Muy bonita»

«Está estable y es muy bonita», reconoció visiblemen­te emocionada la delegada de Bienestar Social del Ayuntamien­to de Los Palacios, que apuntó que tiene «revolucion­ada» a la planta del Hospital de Valme donde está ingresada. «No le van a faltar abrazos, caricias y sonrisas para estos primeros días de vida», dijo entre lágrimas.

Molina detalló que la pequeña llegó al centro con síntomas de hipotermia, ya que estaba completame­nte desnuda y metida en una bolsa de basura. Después de las primeras horas de ingreso, la recién nacida está «en perfectas condicione­s».

La delegada de Los Palacios agradeció la «solidarida­d y colaboraci­ón» de los vecinos del pueblo, que «está consternad­o y preocupado por el futuro» de la niña. En este sentido, sos

La pequeña ya tiene nombre. Se llamará Nieves. Así lo anunció ayer la primera teniente de alcalde y delegada de Bienestar Social del Ayuntamien­to de Los Palacios y Villafranc­a, Carmen María Molina, que anunció que la niña hallada en un contenedor de basura se llamará Nieves, en honor a la patrona del municipio y por el frío que hacía la tarde-noche en la que fue localizada gracias a su llanto.

«Si llega a tardar cinco minutos más en sacarla, la niña habría fallecido», dicen los vecinos de Los Palacios

tuvo que el proceso de adopción de la pequeña tiene sus «cauces formales», amén de que la Policía Judicial está ya buscando a su familia biológica, que tendrá que decidir si se hace o no cargo de la recién nacida.

«No estuvo mucho en el contenedor, pero sí lo suficiente para un bebé sin ropa ninguna», recordó la responsabl­e municipal, que se mostró confiada en que «en unas horas» la Policía Judicial pueda tener algún dato nuevo sobre la familia biológica de la pequeña.

Los testimonio­s de los vecinos de Los Palacios coincidían: la niña habría fallecido si no se hubiera actuado con rapidez. «Si Fernando llega a tardar cinco minutos más en encontrarl­a y sacarla, cien por cien seguro que la niña habría fallecido», recalcaban.

Así de tajante se mostraba Manuel, propietari­o de un taller cercano al lugar donde ayer por la tarde se encontró una bebé recién nacida dentro de un contenedor de basura. Este vecino de Los Palacios y Villafranc­a fue una de las primeras personas en llegar al lugar tras el aviso salvador de Fernando, un hombre que al depositar varios residuos en el citado contenedor se percató de un tenue sonido «que se asemejaba bastante al llanto de un bebé recién nacido o al maullido de un gatito».

Manuel cuenta con detalles que ponen la piel de gallina cómo fue la dramática situación que les tocó vivir de manera fortuita: «La persona que dejó a la niña lo hizo con la clara intención de que no se descubrier­a, ya que la bebé se encontraba dentro de una bolsa atada a conciencia por las asas. La cabeza estaba hacia abajo, solo sobresalía un piececito minúsculo y ensangrent­ado. Además, la bolsa estaba cubierta por varios cartones. Hubo que remover el interior del contenedor para encontrar el lugar exacto del que procedía el sonido».

Angustia

Fueron momentos de auténtica angustia. Otro vecino presente en el suceso, que prefiere mantener el anonimato, asiente con la cabeza la versión de Manuel: «Como estaba medio asfixiada, cuando Fernando la sacó y la colocó sobre un cartón, en el suelo, la niña estaba prácticame­nte quieta, apenas se movía. No habría aguantado mucho más en la bolsa. Cuando recuperó el aliento comenzó a llorar con un poquito de más fuerza».

La niña –a la que algunos llaman Esperanza en el pueblo y en redes sociales debido a que nació en el día de la festividad de Nuestra Señora de la Esperanza y al simbolismo del nombre– «se encontraba muy colorada y completame­nte llena de sangre, en contraste con su cabecita llena de pelo negro».

Fernando, el héroe anónimo, prefiere mantener silencio y solo ha declarado ante la Guardia Civil. Según afirman los vecinos, «ha pasado una noche muy mala, con ataques de ansiedad debido al episodio tan dramático vivido».

La noticia hizo que el pueblo se llenara de cámaras buscando testimonio­s sobre el suceso

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La mujer que encontró a la niña muestra el contenedor donde apareció // EFE/FERMÍN CABANILLAS

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