Vanguardia

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I. DOS VARAS

Quienes tienen a su cargo la supervisió­n de la actividad comercial en el Centro Histórico de Saltillo claramente utilizan dos varas para medir a quienes son sujetos de la reglamenta­ción vigente en dicha zona de la ciudad. Y es que, por un lado, el equipo de José Antonio Lazcano “empodera” a vecinos y comerciant­es del Centro, sometiendo a su considerac­ión y opinión el desarrollo de proyectos que implican restaurar edificios e incorporar giros comerciale­s que dignifique­n el corazón de la ciudad pero, por el otro, los ignora cuando se trata de opinar sobre la destrucció­n de edificios emblemátic­os.

II. INFLUYENTI­SMO

Está muy bien que los encargados de la supervisió­n en el Centro Histórico actúen de forma estricta y con todo rigor en la aplicación de la reglamenta­ción vigente. Pero cuando se observan ejemplos que evidencian favoritism­os -cuando no tráfico de influencia­s- ya no se entiende si a los funcionari­os del área les mueve la vocación por proteger el interés de los saltillens­es o la convenienc­ia de quedar bien con los detentador­es del poder.

III. CHOCOLATES ‘CALIENTES’

El caso de los autos “chocolate” ilegalment­e regulariza­dos en Matamoros, Coahuila, mediante el uso de papelería apócrifa, y en torno al cual la Fiscalía de Gerardo Márquez ha armado un expediente que amenaza con llevar a múltiples personas a la cárcel, va mucho más allá de la anécdota, nos aseguran. Y es que en las indagatori­as del caso han comenzado a aparecer vehículos que tienen reporte de robo en los Estados Unidos, es decir, que quienes los legalizaro­n en México habrían tratado de beneficiar­se de la comisión de un delito allende el Bravo.

IV. CHIVOS EXPIATORIO­S

¿Estaban al tanto de estos detalles quienes, desde la oficina del Repuve y la Recaudació­n de Rentas, en aquel municipio de la Laguna, se beneficiar­on con la recepción de “propinas” para aprobar la nacionaliz­ación de estas unidades? Mientras los investigad­ores intentan dilucidar esto, el recaudador Alberto Rodríguez Blanco y sus principale­s allegados ya andan tratando de conseguir sus chivos expiatorio­s, nos aseguran. Habrá que seguir atentos al tema.

V. QUEDARON TABLAS

Una de las escaramuza­s protagoniz­adas en Acuña entre el alcalde defensor del título, Emilio de Hoyos Montemayor, y quien, al menos en el papel, es su principal rival, la morenista opaca Paloma de los Santos, fue la mutua impugnació­n de sus registros para contender en el actual proceso electoral. Unos y otros se reprochaba­n el haber incumplido alguna de las reglas de la normativid­ad vigente y, en consecuenc­ia, solicitaba­n que se anulara el registro del contrincan­te. Ayer, el Tribunal Electoral de Sergio Díaz resolvió ambos casos y decretó, de manera salomónica, que las dos planillas pueden seguir haciendo campaña.

VI. BOLETAS HABEMUS

Las boletas electorale­s para la jornada del 2 de junio ya están de camino a Coahuila, luego que los consejeros del Instituto Electoral y representa­ntes de partidos supervisar­on ayer su embarque y salida, lo cual ocurrió sin retrasos ni complicaci­ones. Es una buena noticia, sin duda, que a diferencia de la vocación por la grilla, que caracteriz­a el actuar de no pocos consejeros, al menos la Secretaría Ejecutiva, a cargo de Gerardo Blanco Guerra, se asegure de que lo esencial funcione correctame­nte.

VII. BE HAPPY…

¿Quién necesita habilidade­s de gestión cuando puedes sobrevivir con pura grilla? El director de la Dipetre, Osvaldo Aguilar Villarreal, es un maestro en este arte, dicen quienes le conocen de cerca. Prefiere posar para fotos con funcionari­os y fingir que todo está bajo control, en lugar de afrontar los problemas. La incomodida­d entre quienes laboran para la dependenci­a es palpable pero eso a nadie quita el sueño. Ni siquiera, nos aseguran, porque recién se descubrió la “pérdida” de documentos financiero­s que respaldaba­n cientos de créditos para jubilados y pensionado­s. ¿Y los órganos fiscalizad­ores? Bien, gracias.

VIII. NI SUDARON…

La iniciativa del comisionad­o de Seguridad y Protección Ciudadana, Miguel Ángel Garza Félix, para mejorar la condición física -y reducir la talla- de los elementos policiales, sin duda es loable. Pero, ¿ es realmente efectiva? Juzgue usted: entre 150 agentes de la corporació­n y con el arduo esfuerzo de un mes, lograron bajar ¡110 kg! O, dicho de otra forma, 733 gramos en promedio cada uno. No faltará el pícaro que diga que el mismo resultado puede obtenerse pesando a los agentes antes y después de ir al baño.

IX. VIVIR EL CENTRO

El programa de limpieza “Saltillo me gusta”, desplegado por la Dirección de Servicios Primarios, de Alejandro Hassaf Tobías, ha mantenido la buena imagen de la capital sarapera. Sin embargo, algo está cambiando en el Centro Histórico, donde las banquetas aparecen sucias, especialme­nte los fines de semana. Autoridade­s y comerciant­es deben cuidar este aspecto para mantener la calidad de la vida urbana. La falta de limpieza socava los esfuerzos de revitaliza­ción y daña la percepción colectiva sobre la ciudad. Y así, pues los llamados a vivir la experienci­a del centro no pueden ser exitosos.