Damas Voluntarias, el motor que mueve a la Cruz Roja
La coordinadora local de Damas Voluntarias de la Cruz Roja, delegación Saltillo, Raquel Torres de López, indicó que este grupo, integrado por 30 mujeres, no cesa en la búsqueda y aplicación de proyectos para recaudar fondos.
“Nosotras somos las encargadas de obtener el dinero y el Consejo lo administra”, dijo.
Actualmente se encuentran en la migración a la era digital. La colecta anual que está por iniciar contará con la impresión de un código QR en las ánforas, para que la ciudadanía tenga la oportunidad de donar en efectivo o a través de Paypal.
La Cruz Roja llegó a la ciudad en 1944 a iniciativa de Don Jesús del Valle Arizpe, perteneciente al Club Rotario Saltillo, junto con don Francisco Leal y Humberto Castilla.
En 1949 llega don Francisco Leal, y es cuando la institución se muda de la calle Ateneo en su cruce con Guerrero a la calle de Acuña, donde hoy se encuentra la Universidad Carolina.
“Las ambulancias batallaban por la inclinación de la calle, y las camillas con los enfermos que se movían mucho, entonces las hermanas que estaban dijeron que había que cambiarlos. Entonces es cuando consiguen un terreno donado por don Isidro López en la calle de Presidente Cárdenas y
Rayón”, relata.
En 1958, se integra el señor Emilio Arizpe, como presidente del Consejo, y las Damas Voluntarias, a cargo de su esposa, fueron las encargadas de la construcción de la Cruz Roja en Presidente Cardenas.
HUBO CONCIERTOS CON PEDRO INFANTE Y JULIO IGLESIAS PARA RECAUDAR FONDOS
Durante los 30 años de su administración organizaron conciertos con Pedro Infante y Julio Iglesias para recaudar fondos.
A esta administración le siguió la encabezada por el matrimonio conformado por don Jorge Torres y María Esther López.
Tras ellos, continuaron el señor Luis Arizpe y su esposa la señora Concepción Aguirre. Ellos tuvieron la visión de construir las instalaciones que continúan en el bulevar Carlos Abedrop que se inauguró en 2014.
Hace seis años, se nombró al señor Arturo López Alanís como Presidente del Consejo y su esposa Raquel Torres. Ellos han logrado incrementar el parque vehicular, instalar paneles solares, migrar hacia la digitalización de expedientes, y ofrecer servicios de especialidad como ginecología, pediatría, así como un laboratorio y ultrasonidos de alta tecnología. Lograron elevar el nivel de la Cruz Roja.