Riesgosa elección de carrera
Es la encrucijada estudiantil.
Después de la Prepa se abre el abanico de las posibilidades. Es una policromía variadísima. En el pasado siglo, todavía la raza brava del Ateneo podía elegir entre las humanidades, lo técnico o lo científico. O abogado o técnico mecánico o ingeniero. Ahora hay muchos titulares impresionantes y atractivos que despiertan la curiosidad del preparatoriano recién graduado.
La orientación vocacional no siempre es suficiente. Algunos sólo escogen la carrera del papá, que fue, también, la del abuelo.
Otros se van por una elección puramente intuitiva, sin suficiente información o imitan la elección de algunos amigos para seguirlos teniendo como compañeros.
Algunos y algunas, después de un curso vocacional, optan por vivir una vida consagrada, alejada de los intereses mundanos, con activa presencia misionera, con miras a bienes eternos y a una trascendencia de gozosa gloria.
ELECCIONES DENTRO DE LA ELECCIÓN
Los centros educativos, a su vez, hacen propaganda de sus carreras, presentándolas como lucrativas y fascinantes. La convergencia de aptitud con desempeños, de capacidades con desafíos, de temperamentos con exigencias no resulta siempre congruente y acertada.
Suele ser el tiempo del noviazgo en que se está eligiendo también al futuro cónyuge. Los plazos se van cumpliendo y, algunas veces, la elección de carrera se vuelve una improvisación precipitada. Se presenta, además, otra elección, ya elegida la carrera: ¿estudiar en institución pública o privada? Hay entonces decisiones dictadas por las condiciones económicas de la familia.
TALENTO O CODICIA
Las empresas tienen interés en contratar un personal de capacidad especializada. Se informa que hay servicios profesionales bien remunerados y no pocos eligen Mecatrónica o algo relacionado con eso que llaman “inteligencia artificial” o con Robótica, en la que jóvenes mexicanos han admirado al mundo por sus productos de sorpresiva originalidad.
Por encima de las ganancias empresariales, las costumbres hereditarias familiares, las imitaciones afectivas, las codicias económicas, es esencial que cada joven conozca sus talentos y escoja las tareas que respondan a sus ideales, a su estilo de vida y al ambiente que sueñe para su propio futuro.
BENDICIÓN COMO CERCANÍA
Bendición es bien-decir, decir lo bueno, decir para el bien. Y decirlo por la cercanía, por el buen deseo de que se inicie o se continúe lo mejor de la vida, con un cambio de mentalidad y un corazón renovado. Y eso a cada persona individual. Si varios, unidos, lo piden no se alude a lo que los une, sino a lo que cada uno busca, intenta y suplica de la bondad divina.
Para Zaqueo sinvergüenza y explotador, su subida al árbol fue confianza suplicante y la mirada de Jesús, la noticia de que se hospedaría en su casa y su presencia cercana en ella fue una bendición pastoral que lo llevó a restituir y a que llegara a su casa el reino de Dios.
Sabía que el Señor no bendecía su corrupción, sino su persona en búsqueda. Muchos −gentes que se creían decentes− en el pueblo, se indignaron porque Jesús se había hospedado en casa de un pecador abusivo y estafador. Después vieron que Zaqueo daba la mitad de sus bienes a los pobres y, a quienes había explotado, les daba cuatro veces más.
PREGUNTA RETRASADA
Se encontraron respirando viento frío, bajo el caliente sol de febrero. “No nos veíamos desde el año pasado”, le dice el alto al chaparrito. “¿Qué me aconsejas para vivirlo en este año bisiesto que ya va dejando la infancia?”.
El chaparrito levantó la cabeza y aconsejó muy sabiamente: “Ponte un ideal como cumbre para alcanzarla. Acéptate a ti mismo. Ten una jerarquía de valores. Ilumina con tu mente a tu voluntad que controla tus pasiones y vive el momento presente”...
Se detuvo el camión frente a ellos y ambos entraron. El alto se agachó al entrar y dio la mano al bajito, al arrancar el motor...