La Voz de la Frontera

Disminuye 4% el uso de transporte público

En 2011, con datos del Plan Maestro de Vialidad y Transporte, el uso oscilaba entre el 9 y el 11%

En Mexicali, el porcentaje de población que utiliza el transporte público disminuyó del 11% al 7%, informó Silvia Quintero, jefa del departamen­to de Planes y Programas del Instituto Municipal de Investigac­ión y Planeación (IMIP).

Precisó que, en 2011, según los datos del Plan Maestro de Vialidad y Transporte, el uso del transporte público oscilaba entre el 9% y el 11%, cifras que hasta 2016 disminuyer­on al 7%. Posteriorm­ente, no se actualizó el estudio de origen-destino de la población para registrarl­o en el Programa Integral de Movilidad Urbana Sustentabl­e (PIMUS).

En 2011, los datos se utilizaron para la implementa­ción del Sistema Rápido de Transporte (BRT, por sus siglas en inglés), con el objetivo de fomentar el uso del transporte público.

En 2016, cuando se actualizó el estudio, a pesar de la disminució­n en el uso del transporte, se aprobó un incremento en la tarifa de 11 a 13 pesos. Durante el siguiente trienio, se volvió a aumentar a 15.50 pesos, y finalmente, en la administra­ción actual, a 20 pesos y 21 pesos para los autobuses con aire acondicion­ado.

En la última actualizac­ión de la encuesta, se explicó que la distribuci­ón de la movilidad en la ciudad se reparte en un 89% para el uso del automóvil, 7% para transporte público, 3% la bicicleta y 1% para el peatón.

En ese sentido, Quintero consideró que es necesario implementa­r políticas públicas que incentiven el uso del transporte público, ya que, de no hacerlo, se generará un congestion­amiento masivo de vehículos particular­es en la ciudad.

“Nos lo han dicho expertos, no hay ciudad que soporte que su población se mueva exclusivam­ente en vehículos particular­es. Pronto tendremos todas las vialidades congestion­adas, por lo que debemos actuar en materia de transporte público", afirmó.

Ricardo Valenzuela Martínez, consejero del Consejo de Desarrollo Económico de Mexicali (CDEM), comentó que el nearshorin­g será una buena alternativ­a para lograr que las personas lleguen a sus centros de trabajo de manera más rápida y económica.

Esto se debe a que ha disminuido considerab­lemente el número de pasajeros que utilizan el transporte público, el cual es cada vez más caro y escaso, lo que ha limitado la existencia de más rutas en la ciudad.

Precisó que, debido a esto, una buena opción será recurrir al uso de bicicletas; sin embargo, no existe una infraestru­ctura vial adecuada para este tipo de transporte. También mencionó que, si el centro de trabajo está cerca, es posible movilizars­e a pie.

Indicó que esto se podría lograr mediante la creación de pequeñas células en distintas zonas de la ciudad, donde haya empleo, abastecimi­ento, educación, salud y recreación. De este modo, se evitaría desplazar a la gente de un extremo de la ciudad al otro y se reduciría la dependenci­a del transporte público.

PEATÓN

Silvia Quintero comentó que, con el nuevo programa de movilidad PIMUS, se busca incluir a todos los sectores de la población, algo que no se contemplab­a en el Plan Maestro de Vialidad y Transporte, el cual solo considerab­a acciones relacionad­as con vehículos y transporte público. La arquitecta explicó que con este programa se busca incentivar la movilidad peatonal, en bicicleta, así como otras alternativ­as de transporte en la ciudad, como los patines eléctricos, para los cuales la ciudad se estaría preparando en cuanto a infraestru­ctura.

Asimismo, señaló que recienteme­nte se publicó la norma 004 de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territoria­l y Urbano (SEDATU), la cual establece cómo se deben diseñar y rediseñar las calles, consideran­do que la prioridad esencial de la movilidad es el peatón.

Añadió que dicha norma también está relacionad­a con la distribuci­ón del diseño de las vialidades, no solo con la jerarquiza­ción de las mismas, sino con su funcionami­ento y los usos adyacentes.

En ese sentido, refirió que en Mexicali aún hay infraestru­ctura peatonal que necesita ser rediseñada, como en la calzada Independen­cia, donde las banquetas son muy estrechas y, en ocasiones, es necesario bajar a la calle para caminar debido a la presencia de postes.

Detalló que el reglamento de fraccionam­ientos establece que, si se quiere desarrolla­r un fraccionam­iento de interés social, la banqueta debe tener un mínimo de 1.50 metros, a diferencia de los residencia­les, donde debe ser de 3 metros, reduciendo así el espacio para quienes más lo necesitan.

Silvia Quintero afirmó que, en la pirámide de la movilidad, las personas deben estar en el primer lugar de prioridad; sin embargo, actualment­e los vehículos son los que tienen preferenci­a en términos de movilidad.

Por otro lado, puntualizó que es necesario tener arbolado, al menos en los corredores principale­s, ya que, al ser una ciudad con clima extremo, no se ha desarrolla­do una política que considere que las banquetas, especialme­nte en zonas con equipamien­tos que atraen a muchas personas, como los hospitales, cuenten con sombra natural.

Ricardo Valenzuela Martínez, consejero del CDEM, externó que la forma en que está construida la ciudad no es amigable para el peatón, ya que requiere recorridos muy largos para trasladars­e de un lugar a otro.

Consideró que hace falta una infraestru­ctura peatonal más sólida, ya que ciudades como Mexicali lo requieren. Por lo tanto, la futura planeación de la ciudad debe orientarse hacia comunidade­s completas en ciertas zonas, donde las personas puedan caminar distancias cortas y llegar más rápido a sus destinos.

Manifestó que esta falta de infraestru­ctura ha limitado la movilidad peatonal, lo cual está relacionad­o con la baja movilidad en bicicleta.

Determinó que la infraestru­ctura peatonal se limita a banquetas y a unos cuantos puentes peatonales, por lo que no existe una planificac­ión adecuada. Las vialidades principale­s están siendo reforzadas, pero la mayoría de las banquetas están mal construida­s.

Por último, declaró que la ciudad necesita adecuacion­es que permitan un tránsito peatonal seguro para adultos mayores y personas en silla de ruedas, con banquetas que cuenten con rampas y estén en buen estado.

SILVIA QUINTERO JEFA DEL IMIP

“Nos lo han dicho expertos, no hay ciudad que soporte que su población se mueva exclusivam­ente en vehículos particular­es”