Guardavidas que se ahogó tenía epilepsia
MARIELA TAPIA
El guardavidas que murió en la alberca del Centro de Desarrollo Humano Integral Centenario sí estaba capacitado para realizar dicha labor, sin embargo, padecía de epilepsia.
El titular de la Dirección de Bomberos, Rubén Osuna Beltrán, comentó que el guardavidas sí contaba con los conocimientos necesarios, no obstante, en el certificado médico que presentan, no precisó ese tipo de detalles.
Alguien que padece esa enfermedad, la cual consta de un trastorno en el que se interrumpe la actividad de las células nerviosas en el cerebro, lo cual provoca convulsiones, no debería de ser guardavidas, ni tampoco alguien que tiene enfermedades cardíacas.
Para ser guardavidas, dijo que se solicita un certificado médico, pero no se obliga a realizarse otro tipo de evaluaciones más específicas para hacer notar que tienen algún tipo de trastorno.
Lo anterior se establece en el Reglamento para Seguridad en Albercas, Piscinas y balnearios de esta ciudad.
A la fecha, dijo que 105 personas han sido certificadas en lo que va de este verano como guardavidas, para trabajar tanto en albercas públicas, balnearios y albercas privadas.
EL INCIDENTE
El pasado jueves 27 de junio, murió Luis, de 30 años, en la alberca ubicada en el Centro de Desarrollo Humano Integral Centenario.
Trabajadores del espacio recreativo notaron que el cuerpo del guardavidas estaba flotando en la alberca, por lo que pidieron ayuda a la central de emergencias.
De acuerdo con el Servicio Médico Forense, la muerte fue consecuencia de asfixia por ahogamiento.