El fuego interior
que Brod no mantenía distancia alguna, imponía a los textos de Kafka una armonía ficticia y, al mismo tiempo, trataba de restar valor a todas las demás lecturas posibles”. De hecho, en la parte final de su resención, Benjamin llega a preguntarse cómo fue posible la relación de Kafka “con ese hombre”.
Las dos notas que Kafka le dejó a Brod, una escrita en 1921 y la otra en las postrimerías de 1922, contenían instrucciones algo contradictorias —aunque siempre autodestructivas— en caso de que el enfermizo Kafka no pudiera ya levantarse de la cama. En la primera le pedía quemar “sin leer” todos sus “diarios, manuscritos, cartas ajenas o propias, dibujos, etc.”; mientras que en la segunda precisaba que, de todo cuanto había escrito, lo único realmente “válido” eran La condena, El fogonero, La metamorfosis, En la colonia penitenciaria, Un médico rural,y el relato “Un artista del hambre”. Eso “no significa —le aclaraba— que tenga ningún deseo de que se reediten ni de que pasen a la posteridad; al contrario, si desapareciesen por completo, se cumpliría mi verdadero deseo. Pero si alguien quiere conservarlos, que lo haga”. Ahí mismo insistía en que otros textos como los publicados en revistas, así como manuscritos y cartas debían ser arrojados al fuego “sin excepción alguna”. E incluso le pide que los solicite y busque: “Todo lo que puedas recuperar de quien lo tenga”.
El caso de Kafka le recordaba a Borges (…) él también sentía por momentos la alegría del éxito literario. Las más de las veces acompañaba a dicha alegría un quieto sonreír” (Max Brod, Kafka, Alianza editorial, 1982). Y esto sin duda se confirma con los textos que ya había publicado en algunas revistas.
Así, pues, en 1912, durante un viaje camino a Weimar, se detienen en Leipzig y Brod le presenta a Ernst Rowohlt y Kurt Wolff, quienes dirigen la editorial Rowohlt. En sus escritos autobiográficos, Kurt Wolff recuerda ese encuentro sin dejar de asestar otro golpe a la reputación del amigo de Kafka: “Que Max Brod me perdone, pues yo sería la úl