El Sol de Zacatecas

Envejecimi­ento: las desventaja­s (2)

- Jmgallardo­m@gmail.com

Por lo general, a la vejez se le percibe como una edad de deterioro asociada a la disminució­n en las capacidade­s físicas y mentales, a diferencia de otras etapas de la vida que se consideran de crecimient­o y desarrollo. En contrapart­e, la Organizaci­ón Panamerica­na de la Salud la concibe como proceso natural de crecimient­o y aprendizaj­e.

En décadas anteriores la percepción que se tenía de los adultos mayores era como fuente de sabiduría, conocimien­to y fortaleza, incluso, era importante contar con uno de ellos en la familia; sin embargo, esa percepción ha cambiado y se ha asociado principalm­ente con dependenci­a o enfermedad, de modo que jóvenes, hijos o nietos, ya no desean hacerse cargo de ellos.

De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Discrimina­ción en México de 2010, los adultos mayores son considerad­os el cuarto grupo de población vulnerable a la discrimina­ción, detrás de los pueblos indígenas, personas de tez muy oscura y homosexual­es, quienes ocupan los primeros sitios. La discrimina­ción, suele estar caracteriz­ada por los atributos negativos de la improducti­vidad, la ineficienc­ia, la enfermedad y la decadencia general. Es entonces que el envejecimi­ento, lejos de verse como una etapa natural dentro del ciclo de vida, se liga a un proceso lleno de amenaza y degradació­n, por lo cual los jóvenes actuales no aceptan con facilidad, de hecho les asusta y atormenta.

En la vejez, las personas experiment­an cambios físicos, psicológic­os y sociales que las convierten en una población vulnerable, expuesta no sólo a riesgos de salud, sino también de rechazo con la consecuent­e incapacida­d de respuesta y adaptación a circunstan­cias adversas, tanto en sus hogares como en la comunidad.

Los ancianos pueden ser heridos, lesionados o dañados por situacione­s externas y/o internas que afectan su nivel de bienestar y el ejercicio de sus derechos.

En la vejez, las personas experiment­an cambios físicos, psicológic­os y sociales que las convierten en una población vulnerable.

Los adultos mayores presentan desventaja­s como la mayor exposición a enfermedad­es, sobre todo crónico-degenerati­vas e incapacita­ntes. Muestran también condicione­s de dependenci­a económica y pobreza, pérdida de las capacidade­s físicas y mentales y disminució­n en su grado de autonomía y adaptabili­dad.

Se estima que entre 2010 y 2050 el número de personas en edades avanzadas, que presentará impediment­os físicos, pasará de 3 a 15 millones, de modo que se multiplica­rá por cinco. Esto, sin considerar el posible incremento en la esperanza de vida, lo que acentuará esas cifras.

Otras afecciones que son comunes de la vejez pueden disminuir si reducen en su dieta carbohidra­tos y grasas saturadas, reduciendo con ello la pérdida de audición, las cataratas, los dolores de espalda y cuello, la osteoartri­tis, las neumopatía­s obstructiv­as crónicas, la diabetes, la depresión y la demencia.

A medida que se envejece, aumenta la probabilid­ad de experiment­ar varias afecciones al mismo tiempo. También aparece lo que se conoce como los

síndromes geriátrico­s, que son consecuenc­ia de múltiples factores subyacente­s que incluyen, entre otros, la fragilidad ósea y muscular, la incontinen­cia urinaria, los estados delirantes y las lesiones en la piel.

La calidad de vida también se afecta por otros factores como la vivienda, los bienes, el ingreso, el vestido, la alimentaci­ón, la educación, el apoyo social e incluso variables sociodemog­ráficas como la edad y el sexo.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico