Tienen pérdidas más de 5 mil ganaderos
Algunos venden sus animales a precios bajos y otros los han sacrificado por falta de alimento
Municipios al norte de Veracruz están viviendo una crisis sin precedentes debido a la severa sequía que ha provocado una notable escasez de ganado. Más de 5 mil productores locales se ven gravemente afectados, enfrentando pérdidas económicas significativas y desafíos para mantener sus actividades.
El pequeño productor del municipio de Tampico Alto, Eduardo Pulido Fernández, mencionó que desde hace meses la falta de lluvias ha disminuido considerablemente fuentes de agua y pastos necesarios para la cría de ganado, llevando a muchos productores a una situación desesperada.
La escasez de recursos naturales ha obligado a los ganaderos de los municipios de Pueblo Viejo, Tampico Alto y Ozuluama a vender su ganado a precios bajos, mientras que otros han tenido que sacrificar animales por no poder alimentarlos adecuadamente.
“Ahorita es mínima la mortandad de ganado, porque mucha gente está vendiendo desde hace algún tiempo. Ahorita en el campo no hay ganancias, solo pérdidas, porque los compradores no pagan a un precio justo. La gente necesita vender para no perder más. Tanto en la producción de leche como en engorda, no es negocio”, explicó Pulido Fernández.
Además de las pérdidas económicas directas para los productores que se dedican a esta actividad primaria, la escasez de ganado podría afectar el abastecimiento local de productos derivados como leche y carne, lo que podría llevar a un aumento en los precios para los consumidores de la región.
Otra situación que enfrentan es el ingreso de agua salada al norte de Veracruz, causando severas afectaciones para el sector. “Está un poco salobre, pero el ganado la toma así; no tenemos opción porque, de no darles agua, el ganado morirá más rápido”, añadió Pulido Fernández.
Mencionó que esta situación ha generado gastos extra para los productores, quienes tienen que buscar opciones para abastecerse de agua, así como para conseguir alimento para sus animales. “Vamos a un manantial que está como a ocho kilómetros de distancia, pero también se está agotando, y necesitamos agua. Tenemos que salir a agarrar agua para el ganado; otros van a la estación Carbono, detalló el productor ganadero.