¡Atalanta es campeón!
Mallorca despidió al "Vasco" Aguirre Termina con la racha invicta del Leverkusen
La salida de Javier Aguirre del Mallorca ya es una realidad. El entrenador mexicano dirigirá el choque ante el Getafe por la última fecha de la Liga y se despedirá de los Bermellones tras dos años en la isla.
El Vasco había dejado su continuidad en el aire durante toda la segunda vuelta de la temporada ibérica. Incluso, en la última rueda de prensa, tras el 2-2 frente al ya descendido Almería, dijo “yo estoy muy feliz, pero mi mayor preocupación es el Getafe, no veo, por ahora, más allá de ese partido”.
La dirigencia mallorquinista se reunió con el técnico azteca y decidieron finiquitar la relación después de dos temporadas completas y el interinato, cuando arribó en 2022 para librar de la quema al equipo rojinegro.
En su estancia como técnico del Mallorca, Aguirre ha dirigido 96 encuentros, con 33 triunfos, 28 empates y 35 derrotas, lo que le da un porcentaje de victoria del 44.1%, uno de los más bajos en su trayectoria, aunque siempre logró mantenerlos en la élite del futbol español.
Las especulaciones hablan de que Javier Aguirre ha tenido contacto con la Federación Mexicana de Futbol para tomar un puesto directivo. El Vasco no vería con malos ojos retornar y ayudar al balompié nacional de cara a la Copa del Mundo del 2026, donde el Tricolor será anfitrión en conjunto con Estados Unidos y Canadá. Aguirre tendría un puesto como asesor en la selección.
El Atalanta se proclamó este miércoles campeón de la Liga Europa en una noche mágica, en la primera final europea de su historia, destrozando en Dublín a un histórico Bayer Leverkusen (3-0) y con el nigeriano Ademola Lookman como héroe absoluto, autor de un "hat-trick" espectacular con el que glorificó a la diosa griega encarnada en un pequeño equipo de futbol.
Eran 51 partidos seguidos los que el Leverkusen llevaba sin perder. Era una sensación de superioridad absoluta la que emanaba el equipo de Xabi Alonso durante toda la temporada. Era un "triplete" histórico el que oteaba el combinado de las aspirinas, que portó el cartel de favorito en Dublín de manera merecida por su inolvidable año, en el que ganó una Bundesliga -la primera de su historia- para el recuerdo.
Pero el Atalanta, un equipo de la pequeña localidad de Bérgamo, situada a apenas 60 kilómetros de Milán, en el norte de Italia, se convirtió en aquella pequeña aldea gala irreducible de Astérix y Obélix, encarnados en Gasperini y Lookman, que quiso ser una excepción para escribir su propia historia.
PRIMERA FINAL EUROPEA
Porque llegó a su primera final europea y la ganó. Y lo hizo con toda la determinación posible y con un héroe absoluto, un Lookman que pasará a la posteridad con una final de ensueño que culminó una campaña igualmente dorada y que regaló a la ciudad de Bérgamo un título inolvidable. La goleada de Anfield, el paseo ante el "invicto" Leverkusen, el premio a la "Era Gasperini", que impuso su plan al del técnico tolosarra. Este Atalanta es un pedazo de historia.
Fue un torbellino en la primera mitad. Fue así como los de Gasperini lograron lo que muy pocos habían logrado durante esta temporada: desdibujar a un Leverkusen que, perdido, superado en los costados, incapaz de superar la presión alta de los de Bérgamo, sucumbió en la primera mitad sin paliativos.
En concreto sufrió el desborde y el acierto de un Lookman que tuvo en este duelo su partido consagratorio. Gran conocido por las defensas en la Serie A, no pudo elegir mejor escaparate para presentarse en Europa, con un doblete que descosió al temido e invicto equipo de Xabi Alonso.