Importancia del año dual México-Brasil
Por iniciativa del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales (COMEXI) hace unos días se llevó a cabo, en la sede del Club de Industriales de esta capital, un interesante conversatorio sobre el Año Dual México-Brasil y el 190 Aniversario del establecimiento formal de relaciones diplomáticas entre ambos países.
En dicho evento participaron como ponentes el embajador de Brasil en México, Fernando Coimbra; la directora general del Instituto Matías Romero, embajadora María Teresa Mercado, y el director general para América del Sur de la Cancillería mexicana, maestro Pablo Monroy, quienes expusieron la importancia de conmemorar los 190 años que han transcurrido desde que México y Brasil formalizaron sus relaciones diplomáticas, las cuales son de las más antiguas desde las respectivas independencias en el siglo XIX.
Los diplomáticos antes mencionados coincidieron en señalar que el “Año Dual MéxicoBrasil” es una muestra tangible del relanzamiento de la relación bilateral, a partir de la toma de posesión del presidente Luis Inácio Lula da Silva en enero de 2023, y se produce como resultado de los acuerdos adoptados en la V Reunión de la Comisión
Binacional, celebrada en México en abril del año pasado.
También destacaron que México y Brasil están llamados a construir una sociedad cada vez más estrecha y constructiva, ya que representan las dos principales economías de América Latina y el Caribe (más del 50% del PIB regional), además de ser los dos países más poblados y con la mayor extensión geográfica de nuestra región, así como poseedores de una vasta riqueza histórica y cultural.
Actualmente, Brasil es el principal socio comercial de México en América Latina y también es el principal destino de las inversiones mexicanas en la región.
Independientemente del comercio y las inversiones, los ponentes destacaron que existe una diversidad de temas en los que México y Brasil se han comprometido a profundizar su diálogo político para estrechar sus vínculos bilaterales, particularmente para promover los flujos turísticos, los intercambios académicos y de becas estudiantiles, así como una mayor cooperación cultural, tecnológica y científica.
Hubo coincidencia en que, con una visión pragmática y de largo plazo, México y Brasil pueden constituirse en “países puente” para facilitar la integración regional, a través de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y de otros mecanismos regionales. En este sentido, existe el convencimiento de que una estrategia compartida entre México y Brasil puede favorecer la concertación de posiciones comunes para abordar los principales temas de las agendas regional y global, como son el combate a la pobreza y la desigualdad social; el cambio climático y el desarrollo sustentable; el desarme y la seguridad regional, entre otros.
En este contexto, los expositores detallaron un extenso programa de actividades que, como parte del Año Dual México-Brasil, se realizará a lo largo del presente año tanto en México como en Brasil para acercar a los pueblos de ambos países. Entre otras actividades, se tiene previsto la celebración de eventos culturales en las áreas de literatura, cine, música, artes visuales y artes plásticas. Además de actividades gastronómicas, deportivas, elaboración de publicaciones conjuntas, así como diálogos binacionales sobre temáticas e iniciativas de interés común.
Durante el conversatorio, también se produjeron interesantes propuestas para propiciar un mayor conocimiento recíproco de ambos países, entre las cuales se destacaron las siguientes: 1) la realización de sendas cátedras sobre Brasil en el Instituto Matías Romero y de México en el Instituto Río Branco, a fin de que los jóvenes diplomáticos brasileños y mexicanos tengan una aproximación inicial y comprensiva de nuestros respectivos países; 2) organizar una biblioteca básica de los 25 principales libros que deba conocerse de cada país, y 3) renovar el Programa de Intercambio de Estudiantes BrasilMéxico (BRAMEX), a fin de ofrecer un mayor número de becas de posgrado a estudiantes de los dos países.
En conclusión, podemos afirmar que el Año Dual México-Brasil es una oportunidad única que debe aprovecharse no solo para refrendar 190 años de relaciones diplomáticas y de amistad, sino para impulsar un mayor acercamiento político y de cooperación en todos los ámbitos económicos, comerciales, de inversión, sociales, culturales y académicos que beneficie los intereses de ambos pueblos. Embajador de Carrera (en retiro) del Servicio Exterior Mexicano (SEM), exembajador de México en Brasil (2019-2022) y actualmente coordinador de la Unidad de Estudio y Reflexión del COMEXI sobre Brasil.