La hotline de los soplones del T-MEC
Los estadounidenses abrirán una línea telefónica confidencial para los
soplones mexicanos, canadienses y también de la nación que hoy gobierna Biden que quieran quejarse de las condiciones de trabajo bajo el manto protector del T-MEC.
El Departamento de Trabajo de Estados Unidos está pidiendo la opinión pública sobre un proceso importante relacionado con la recopilación de información laboral.
Esta revisión es parte del cumplimiento con el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y se enfoca en la creación de una línea de atención (una hotline) destinada a recibir reportes sobre problemas laborales de manera confidencial. Los comentarios, si despierta reacciones en aquélla nación, deben enviarse antes del 5 de noviembre de 2024.
La nueva línea de atención, muy desarrollada para web, permitirá a los trabajadores, incluidos aquellos de México, reportar problemas laborales de forma segura.
La confidencialidad es esencial aquí: el sistema está diseñado para que las personas puedan compartir información sin temor a represalias. Esto es importante para que las violaciones laborales puedan ser informadas y abordadas adecuadamente.
El Departamento del Trabajo busca extender este proceso de recopilación de información por tres años. Esta extensión permitirá seguir recolectando datos necesarios para supervisar las condiciones laborales bajo el T-MEC.
Además, se pretende mejorar la calidad y la utilidad de la información recopilada y ajustar el sistema para hacerlo más eficiente. Se están evaluando diversos aspectos, como la necesidad del sistema, su costo y cómo se pueden hacer las recopilaciones más fáciles y claras.
La línea de atención también enfrenta el desafío de proteger la privacidad de quienes reportan problemas. Es vital que la información se maneje con cuidado para garantizar la seguridad de los denunciantes.
No faltará el empleado que sea perseguido por ser sospechoso de quejarse de las prácticas de trabajo de su planta en México. Una nueva forma de controlar los abusos de las compañías que, seguramente, no agradará a los viejos sindicalistas locales, ni a los dueños de empresas acostumbrados a la explotación.
ANTES ERAN TELES
“Bueno, Arabia Saudita ha crecido dramáticamente porque acaban de permitir la entrada de películas. Inglaterra ha sido excelente. México ha sido muy, muy fuerte, al igual que varios países de América Latina; hay áreas específicas —depende de la película si le va bien o no. Pero el mercado internacional es muy fuerte”, dijo hace unos días Tony Vinciquerra, Presidente y CEO de Sony Pictures Entertainment.
Cuestionado por el negocio, comentó: “Bueno, vamos a sentarnos y observar lo que se nos presente, porque estamos en una posición muy estable y cómoda. Creemos que surgirán muchos negocios de estas empresas. Como mencioné antes, habrá un tiempo caótico en el que ocurrirán muchas cosas: fusiones, quiebras, ventas, lo que sea que suceda. Creemos que surgirán buenos negocios que nos interesarían, principalmente en el área de propiedad intelectual, y ahí es donde realmente estaremos enfocados”.
Otra hipótesis: “La escala será aún más importante en el futuro, porque las empresas que sobrevivan y prosperen serán las grandes. Creo que, si observas la historia y ves cómo las empresas atraviesan este tipo de transiciones, la historia tiende a repetirse. Y si ves cómo han funcionado las cosas, puedes predecir hacia dónde terminarán en general. Y las grandes empresas serán las que sobrevivan, a menos que cometan algún error o cálculo masivo. Así que la escala será importante. Algunos dicen que estamos por debajo de la escala en Sony Pictures. Pero tenemos PlayStation, música y todo el respaldo en electrónica de Sony. No creo que estemos por debajo de la escala si miras la compañía en su totalidad”.