LA TERCERA ES LA VENCIDA…
El tercer debate presidencial fue mejor que los anteriores. Los cambios efectuados por la autoridad electoral, el INE de Guadalupe Taddei Zavala, fueron efectivos. Esta experiencia debe quedar en la memoria institucional para evitar una regresión como la que vimos en los debates previos. Con tres moderadores, el ejercicio fue ágil y permitió mayor interacción entre las candidaturas, con un desempeño general mejorado. Sin embargo, aún falta lograr un intercambio más directo entre los contendientes y mayor profundidad en los temas. Académicos y sociedad civil coinciden: falta mostrar los “cómos” de las propuestas. Pues ahí pa’ la otra.
CUESTIÓN DE MARCAS?
Quien también mostró una tendencia creciente fue Jorge Máynes. El espectáculo del primer debate quedó en el olvido, logró dejar atrás la imagen de la sonrisa de cartón para convertirse en un candidato joven con propuestas modernas y conscientes de las demandas de las nuevas generaciones. Con reflejos rápidos y datos duros, cerró bien su participación en estos ejercicios. Sin embargo, la marca con la que compite, el Movimiento Ciudadano, no le dará la posibilidad de superar el tercer lugar.
BUEN ÁNIMO
Para Xóchitl Gálvez Ruiz, este tercer debate comenzó temprano. Como mencionamos en este espacio, para ella se trataba de dos momentos clave: la gran movilización de la “marea rosa”, por la mañana, en el Zócalo de la CDMX y el debate en la noche. La “marea rosa” cumplió su objetivo reuniendo, según los organizadores, a cerca de un millón de ciudadanos, aunque las autoridades locales insisten en que solo fueron 95 mil... las imágenes dicen otra cosa. En el debate, Gálvez hizo un buen papel y logró conectar en dos momentos de manera contundente contra Claudia Sheinbaum, quien solo hizo mutis. Con esto, Xóchitl llega con buen ánimo al 2 de junio.
SIN DESPEINARSE
La que salió anoche otra vez “con el librito”, a hacer lo suyo, es decir, a no cometer errores y “no caer en provocaciones” fue Claudia Sheinbaum Pardo. Pero, aunque mantuvo el libreto, hubo un par de cuestiones que pueden pegarle en el post debate: la presunta investigación contra Mario Delgado y los señalamientos -incluso personales- realizados por la periodista Anabel Hernández.