México debe participar más a nivel global
México tiene una oportunidad histórica para mejorar su posición en las cadenas globales de valor (CGV), aprovechando las tendencias actuales de nearshoring y distribuyendo los beneficios de esta integración a más regiones del país, según un análisis de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
El estudio, elaborado por el Departamento de Economía de la OCDE, destacó que si bien México ha logrado una significativa integración en las CGV desde la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en 1994, aún enfrenta desafíos importantes para maximizar los beneficios de esta participación.
Según los expertos, la participación de México en las CGV se caracteriza principalmente por vínculos "hacia atrás", es decir, una alta proporción de valor agregado
extranjero en sus exportaciones totales.
En contraste, los vínculos "hacia adelante" —la proporción de valor agregado mexicano incorporado en las exportaciones de otros países— siguen siendo relativamente bajos, lo cual refleja una fuerte especialización en procesos de ensamblaje y posiciona a México como un exportador principal de bienes finales ensamblados para el sector manufacturero estadounidense.
La OCDE subrayó que para impulsar la productividad y promover empleos formales mejor remunerados, México debe enfocarse en ascender en la cadena de valor y desarrollar vínculos hacia adelante más sólidos, y esta evolución es crucial para aprovechar plenamente las oportunidades del nearshoring.
“La postura actual de política comercial de México, de mantener amplios acuerdos comerciales y bajos aranceles, es propicia para la participación en las CVG. Buscar nuevos acuerdos comerciales y mejorar la integración comercial con América Latina también ayudaría a aumentar la participación en las CVG”, indicó.
También recomendó mejorar la infraestructura, logística y conectividad en todo el país, lo que permitiría a las regiones más remotas integrarse mejor en las CGV, así como aumentar la inversión en investigación y desarrollo para impulsar la innovación local y facilitar la realización de actividades de mayor valor agregado en México.
Desde su punto de vista, con un nuevo gobierno que asumirá el cargo en 2024, la implementación de estas políticas podría ser crucial para aprovechar el nearshoring y mejorar la posición de México en las cadenas globales de valor.