RECONOCEN DEPENDENCIA DE LA ENERGÍA FÓSIL
Libia reconoció su situación, pero promovió el desarrollo de energías renovables.
El primer ministro libio del Gobierno de Unidad Nacional (GUN), Abdulhamid Dbeiba, defendió “la posición estratégica” de Libia para el establecimiento de parques solares con vistas al mercado africano y europeo durante la Cumbre Económica y Energética, que se celebró el fin de semana en Trípoli, con representación internacional.
Por su parte, el titular libio de Petróleo y Gas, Mohamed Aoun, advirtió de que Libia no puede “negar su necesidad de combustibles fósiles hasta el 2024” y declaró ante oficiales y petroleras multinacionales que un 30% del país, con grandes reserva de petróleo y gas, “está por descubrir”. “Hemos constatado el descubrimiento de gas natural en las aguas territoriales de Libia oriental y occidental”, dijo Aoun para animar a la inversión de exploraciones.
El ministro turco de Energía, Alparslan Bayraktar, valoró que el país norteafricano “tiene grandes capacidades en energías renovables” y apostó por que Turquía amplíe las “actuales relaciones exitosas” al sector energético.
La segunda edición de la Cumbre Energética y Económica de Libia, un evento promovido por el GUN, contó también con la participación del secretario general de la Organización de Países Africanos Productores de Petróleo (APPO, por sus siglas en inglés), Omar Farouk, quien destacó el papel desarrollado en el pasado por Libia, con las mayores reservas de petróleo del continente.
El país produce actualmente alrededor de 1,4 millones de barriles diarios (mdb) aunque sus yacimientos han estado expuestos a la inestabilidad política desde el derrocamiento del dictador Muamar Gadafi en 2011 y a la interrupción intermitente de la exportación.
El pasado 7 de enero, la Compañía Nacional Libia de Petróleo (NOC) decretó el estado de fuerza mayor en el campo de Sharara, uno de los más importante del país que coexplota la compañía española Repsol, por protestas antigubernamentales contra el desabastecimiento y la falta de inversión en regiones del sur.
Además, la planta gasística de Melita, único centro de exportación hacia Italia a través del gasoducto Greenstream, está amenazada por manifestantes del movimiento “No a la corrupción”, que exigen la destitución del presidente de la NOC, Farhat Bengdara.