Madre no mostró signo de arrepentimiento
La frialdad con que la teniente médico Ana Josefa García Cuello habló ayer a la prensa, generó aún más dudas en la población sobre su inocencia luego de ser señalada de presuntamente decapitar a su hija de seis años.
Cuando fue detenida, por ser la principal sospechosa del crimen, y trasladada hacia la camioneta policial, la médico del Ejército afirmó ante las autoridades que no tuvo nada que ver con la muerte de su pequeña hija.
Frialdad
Sin ninguna muestra de desesperación, ni lágrimas, ni llanto, ni arrepentimiento, la señora, quien es miembro de la iglesia evangélica, respondió a los periodistas cuando les preguntaron qué tenía que decir sobre la tragedia de su hija.
“Que soy inocente. Oiga, soy inocente, yo no he hecho nada. Yo estaba en mi casa orando”, expresó García Cuello en medio de su detención.
Durante el poco tiempo de conversación, una periodista le dice que el cuerpo decapitado de la niña fue encontrado en un charco de sangre en la cocina de la vivienda, mientras que la cabeza fue hallada en el baño.
“¿Y quién la encontró?”, respondió la madre que todo el tiempo estuvo enfocada en hablar de su inocencia y no del horror del crimen que se cometió con la infante.
Culminó diciendo que una vecina se había llevado a la niña para peinarla, y que desde entonces no había visto ni a la vecina ni a nadie más.
A la teniente médico, de 44 años, se le señala de cortar la cabeza a su hija de seis años dentro de su residencia, ubicada en el tercer piso del Residencial La Razón I, en Santo Domingo Este, luego de propinarle al menos un disparo.
La madre habría cometido el crimen en presencia de su otro hijo de cinco años quien abrió la puerta del apartamento, permitiendo así el acceso a un vecino que descubrió la macabra escena.
Investigaciones
Agentes de la Policía incautaron del arma homicida, que se halló en un terreno contiguo luego de presuntamente cometer el crimen.
Diego Pesqueira, vocero de la Policía, confirmó las cámaras de seguridad registraron a ninguna persona entrando o saliendo del apartamento en el momento del crimen. Las circunstancias exactas que llevaron a este trágico evento aún se desconocen.