Presidenta de CCSS fustiga plan de pensión anticipada a bomberos
› Jerarca argumenta que abriría puerta para que otros grupos reclamen
Marta Esquivel, presidenta ejecutiva de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), fustigó el proyecto de ley del Frente Amplio (FA) que permitiría la pensión anticipada a los funcionarios operativos del Cuerpo de Bomberos de Costa Rica.
Esquivel argumentó que la medida tendría efectos negativos en las finanzas del régimen de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM), aunque admitió que la institución aún no tiene cifras sobre los efectos.
Durante una comparecencia en la Comisión legislativa de Asuntos Sociales, la jerarca subrayó que, aunque el trabajo de Bomberos es esencial para la salud pública, la propuesta abriría la puerta para que otros grupos, como policías, guardaparques y personal de salud, soliciten un tratamiento similar.
Esto, según la funcionaria, complicaría la gestión del régimen del IVM y pondría en riesgo su sostenibilidad financiera.
La titular de la institución citó que, en las pensiones de la Caja, no se hacen distinciones entre grupos ocupacionales. Por lo tanto, una disposición como la planteada podría aumentar la demanda de pensiones anticipadas entre otros sectores con características similares de peligrosidad, insistió.
El texto, presentado por la diputada frenteamplista Sofía Guillén, plantea que los funcionarios de Bomberos puedan pensionarse por vejez después de 25 años de servicio activo, con al menos 300 cuotas.
En los casos en que, a los 50 años de edad, no se alcancen las 300 cuotas, pero se hayan completado 15 años de servicio (180 cuotas), se otorgaría una pensión proporcional determinada reglamentariamente.
Jaime Barrantes, gerente de Pensiones de la CCSS, añadió que el proyecto no incluye un estudio actuarial del impacto económico para el régimen.
Barrantes destacó que la regulación vigente requiere cumplir con dos condiciones para pensiones: 300 cotizaciones y una edad de 65 años para la jubilación, y advirtió de que una edad de retiro de 50 años implicaría un “costo importante” para el IVM debido al aumento en la esperanza de vida.
En consecuencia, sugirió que cualquier propuesta de jubilación anticipada debería estar acompañada de un financiamiento adecuado.
El gerente recordó que la Ley de Protección del Trabajador permite adelantar la pensión después de los 57 años si la persona cubre el costo total del retiro anticipado en un solo pago.
Señalamientos. Consultada sobre si evaluó el impacto financiero del plan y presentó algún estudio sobre el financiamiento de la pensión anticipada, Guillén respondió que esa tarea corresponde a la Caja.
La legisladora acusó a Esquivel de incapacidad, argumentando que la estimación del impacto debería hacerla la Caja.
Guillén agregó que no tiene la base de datos de la CCSS para hacer un estudio actuarial.
Priscila Vindas, legisladora frenteamplista, consultó a Esquivel si existe una estimación en la Caja respecto al impacto de un retiro promedio a los 55 años en el IVM.
Además, Vindas destacó que los bomberos tienen un horario semanal de 72 horas, casi el doble de una jornada ordinaria y que, en consecuencia, cotizan más a la seguridad social.
Esquivel respondió que no se ha realizado dicho estudio. Justificó que un análisis actuarial puede tardar entre seis meses y un año.
También mencionó que los datos específicos sobre los bomberos están en el Instituto Nacional de Seguros (INS).
La presidenta de la CCSS recomendó que los proponentes del proyecto presenten el estudio actuarial correspondiente.
Asimismo, la jerarca institucional recomendó analizar la propuesta de Barrantes, que contempla el uso del esquema de retiro anticipado previsto en la Ley de Protección al Trabajador, y eventualmente crear un fondo con la participación del empleado, para mitigar el impacto en el IVM.
En los próximos 25 años, el número de jubilados por vejez en el IVM se triplicará, lo que generará un mayor estrés financiero en el sistema, según publicó La Nación el lunes.