Diego Pereira: “La conclusión más relevante es que la probabilidad de recesión en EE.UU. ha aumentado, aunque continúa por debajo de 50%”
Pulso,
—Si bien los mercados mundiales han recuperado la totalidad de las pérdidas luego del “lunes negro” de hace dos semanas, el economista jefe del Cono Sur del banco de inversiones JP Morgan, Diego Pereira, es cauteloso.
“Desde el punto de vista macro, la conclusión más relevante es que la probabilidad de recesión (en Estados Unidos) ha aumentado en el margen, aunque continúa por debajo de 50%, y que ahora pensamos en una Reserva Federal (Fed) más agresiva en cuanto al paso de normalización de tasas”, afirma a por vía escrita, el economista de origen uruguayo.
Pereira, además, mantiene su proyección de crecimiento para la economía chilena de 2,7% para este año, aunque con sesgo a la baja. “En términos económicos y financieros, me parece relevante volver a enfatizar la reducción de la incertidumbre local, lo cual es condición necesaria para una mejora sostenible en las variables económicas hacia el futuro”, añade Pereira, quien cree que una política monetaria sustancialmente menos restrictiva hacia futuro y un entorno más propicio para la inversión deberían empujar la actividad de la economía chilena.
El economista jefe para el Cono Sur de JP Morgan cree que la normalización de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal será más agresiva de ahora en adelante. Asimismo, Pereira mantiene su proyección de crecimiento para Chile en 2,7% para este año, aunque con un sesgo a la baja, y destaca la caída de la incertidumbre a nivel local en términos económicos y financieros.
A propósito del “lunes negro” vivido hace
dos semanas, en que diferentes mercados globales tuvieron fuertes caídas en sus índices, ¿fue sólo un ajuste de precios o hay algo más profundo?
-Dos factores explicaron la conducta de los mercados. Primero, la constatación de que el deterioro en el mercado laboral parece será más rápido que lo inicialmente pensado, lo cual impulsó al mercado a repensar probabilidades de recesión, y el accionar de la Fed (Banco Central de Estados Unidos) en adelante. Segundo, un factor de naturaleza más técnica asociado a la liquidación de posiciones de trading financiadas con yen japonés (carry trade).
Desde el punto de vista macro, la conclusión más relevante es que la probabilidad de recesión (en Estados Unidos) ha aumentado en el margen, aunque continúa por debajo de 50%, y que ahora pensamos en una Fed más agresiva en cuanto al paso de normalización de tasas, convergiendo a su nivel neutral en el tercer trimestre del año próximo.
¿Seguirá la volatilidad de los mercados en el corto y mediano plazo? ¿De qué podría depender?
-Es muy posible, porque el mercado continuará evaluando las probabilidades de recesión. Además de la información macroeconómica, tenemos eventos relevantes en el horizonte cercano, como las elecciones en Estados Unidos (el próximo 5 de noviembre). Y no debemos olvidarnos de los riesgos geopolíticos latentes.
EL ESCENARIO PARA CHILE
¿Estima que hay señales de desaceleración en la trayectoria de recuperación que ha tenido la economía chilena este año, luego de un estancado año 2023? ¿Cuál es su pronóstico de crecimiento para este año?
-Si comparamos el nivel de actividad de junio con el de diciembre del año pasado, y corregimos por estacionalidad y efectos calendario, la actividad ganó 1.7%, lo que implica 3.4% en términos anualizados.
Claro que la actividad minera ha tenido un rol importante al momento de explicar el crecimiento. De hecho, si excluimos la minería, el crecimiento de la primera mitad del año es de 1.1% anualizado, debajo de su potencial.
Incorporando la evolución de las políticas monetarias y fiscales, mantengo como escenario base que el crecimiento, excluido minería, mejore su momento en la segunda mitad del año, de forma que la proyección anual no la he alterado, mantengo un 2.7%, aunque reconociendo un sesgo a la baja.
La inflación en Chile ha tenido un descenso menos pronunciado del previsto, debido al aumento de las tarifas eléctricas. ¿Cuál es su pronóstico para la futura trayectoria inflacionaria y de movimiento de tasas de interés del Banco Central?
-Efectivamente, nuestras estimaciones para con la inflación consistentemente se movieron por encima del consenso en meses anteriores, por tarifas eléctricas y otros factores. Vemos la inflación convergiendo a 4,5% a diciembre y desacelerando a 3,8 % a finales del año siguiente.
Dada nuestra estimación para con la Fed, de 125 puntos base de recorte de las tasas a fin de año, vemos espacio para que el Banco Central de Chile vuelva a bajar la tasa en diciembre, y la misma llegue a 4,5% en el primer semestre del 2025.
Hay señales de reactivación de la inversión, especialmente minera. ¿Estima que esto es un quiebre de tendencia para el crecimiento de Chile en los próximos años? ¿El 2025 será el mejor año en términos macroeconómicos de los cuatro años del gobierno de Gabriel Boric?
-En nuestro escenario base vemos el crecimiento anual de 2025 en 2,3%, cercano a lo que consideramos el potencial. Pero al desgranar tal proyección, el consumo y la inversión deberían mostrar una mejor performance que en años anteriores. Tal accionar de la demanda doméstica se asocia a una mejor percepción de la evolución cíclica por parte de los hogares y las empresas. Dicho esto, estamos atentos a la probabilidad de recesión en Estados Unidos, lo cual es un riesgo a nuestra proyección y la sesga a la baja.
MENOR INCERTIDUMBRE
¿Se justifica hablar de una “normalización” del país, tal como lo ha argumentado el gobierno y el oficialismo, luego de un periodo de incertidumbre política, la pandemia y una alta inflación?
-Hace meses que dos desbalances macroeconómicos se corrigieron. El primero, la corrección del exceso de demanda y los niveles extremos de inflación observados en 2022-23. El segundo, la normalización de la incertidumbre idiosincrásica que caracterizó al país en el periodo entre octubre de 2019 y hasta 2022-23.
Hacia adelante, una política monetaria sustancialmente menos restrictiva y un entorno más propicio para la inversión deberían empujar la actividad. Dicho eso, el crecimiento potencial ha caído en los últimos años, y reformas más profundas del lado de la oferta parecen necesarias para elevarlo.
¿Ve posible tener una reforma al sistema de pensiones durante este gobierno? ¿Será ese el principal legado del gobierno de Gabriel Boric?
-Es una reforma necesaria para elevar el ahorro nacional, la inversión y el crecimiento potencial. Hace demasiados años que el país se debe tal reforma (de pensiones), y es esperable que la sociedad llegue a un acuerdo transversal para elevar la contribución y el ahorro nacional.
¿Cómo se ve desde el exterior el gobierno de Gabriel Boric en términos políticos y económicos? ¿Se ha transformado más en un gobernante socialdemócrata a medida que ha avanzado su administración?
-No es mi rol elaborar sobre un Presidente (de la República) o una administración en términos políticos. Pero en términos económicos y financieros, me parece relevante volver a enfatizar la reducción de la incertidumbre local, lo cual es condición necesaria para una mejora sostenible en las variables económicas hacia el futuro.P
—Las bajas temperaturas del invierno golpean, pero también impulsan las ventas de distintas empresas. Si bien, por ejemplo, potencia la venta de gas domiciliario, por cañerías o en cilindros, para calefacción, el consumo de otros productos disminuye. Uno de ellos es el de bebidas y cervezas.
El consumo de cerveza se más que duplicó en los últimos años en Chile y la cifra per cápita avanzó con ello desde los 30 litros en 2005 a los 66 litros anuales en 2021, según la Asociación de Productores de Cerveza de Chile (Acechi). La tendencia es, en general, al alza, pero con variaciones estacionales: en el segundo trimestre, la venta de cervezas y bebidas descendió, según los reportes de varias compañías del rubro a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF).
En sus últimos reportes financieros, correspondiente al trimestre abril-junio, la empresa productora de bebidas del grupo Luksic, CCU, evidenció que sus operaciones del periodo estuvieron golpeadas por las condiciones climáticas del país, con varios sistemas frontales que afectaron a distintos lugares del territorio nacional. Sus volúmenes de venta, consolidados, se redujeron 12,7% en el segundo trimestre.
“Los resultados financieros de CCU fueron bastante más débiles que el año anterior, ya que se vieron fuertemente impactados por dos efectos; un contexto particularmente difícil para la demanda en Chile y Argentina (...) En Chile, las industrias de nuestras categorías principales disminuyeron, lo que se explica en gran medida por condiciones climáticas adversas, con temperaturas inusualmente bajas y precipitaciones récord durante el trimestre”, explicó la firma, líder en venta de cervezas, pero que también comercializa vinos a través de su filial San Pedro Tarapacá y gaseosas con marcas como Pepsi, Bilz, Pap, Canada Dry y Limón Soda.
“En CCU, nuestros modelos estadísticos nos muestran que existe una importante relación entre temperatura y el consumo de cervezas y bebidas. Es decir, cuando hace frío o en días con temperaturas inusualmente bajas, las personas reducen su consumo de dichos productos, impactando en los volúmenes”, profundiza Francisco Díaz, gerente de desarrollo comercial de CCU.
COCA COLA
Embotelladora Andina, el mayor licenciatario local de Coca Cola, sufrió las mismas consecuencias. El vicepresidente ejecutivo de la empresa, Miguel Ángel Peirano, detalló en el análisis de sus resultados que experimentaron una caída en el volumen de venta un 6% en Chile, “explicado principalmente por factores climáticos adversos durante el trimestre”, dice.
Este indicador tuvo resultados mixtos en el trimestre, ya que aunque el volumen de venta consolidado subió levemente un 0,3%, en sus operaciones en Brasil se expandió en casi un 20%, pero entre otras cosas, por la razón inversa: “factores climáticos favorables”, sostuvo.
“Los factores climáticos varían en las distintas operaciones, porque estamos hablando de cuatro países que tienen distintas geografías, y muchas veces se generan contrapesos entre sí. Por ejemplo, el trimestre pasado las altas temperaturas de Brasil impulsaron los volúmenes, lo que compensó la baja de Chile producto de la temperaturas. Además, es importante entender que Coca-Cola Andina es una empresa con foco en el largo plazo y eso significa estar en todas las estacionalidades y periodos, y nuestra forma de hacer negocios no se mira por momentos particulares”, dice Peirano en una declaración a Pulso.
Otra licenciataria de Coca Cola, Embonor, en tanto, tuvo una contracción de ventas de un 2,3% en el año, vendiendo un total de 531 millones de litros. “Esta disminución del volumen se debe a un entorno económico contraído y condiciones climáticas muy desfavorables, particularmente mayores precipitaciones en la zona centro-sur durante el segundo trimestre”, explicó la firma en sus estados financieros presentados a la CMF.
Esta compañía opera en las regiones de Arica y Parinacota, de Tarapacá, de Valparaíso, del Libertador General Bernardo O’Higgins, del Maule, del Bío Bío, de Ñuble, de la Araucanía, de los Ríos, y de los Lagos, y vende cerca del 37% del volumen total de Coca-Cola a nivel nacional, según reporta en su página de internet.
Concha y Toro, el principal productor de vinos de Latinoamérica, controlada por la familia Guilisasti, además de vino comercializa cervezas y otros licores. En el trimestre, las ventas de la compañía en Chile bajaron 5,7% en volumen, pero subieron 2,5% en valor, por un mejor mix de precios. Pero mientras el volumen de vino bajó 3% en el país, la categoría cervezas y licores lo hizo en 13% y 14,4% en valor, “debido, en gran medida, a menores ventas de cervezas premium, explicado por una alta competencia en dicho segmento, unido a un menor consumo producto de las condiciones económicas actuales y menores temperaturas”, dice la firma sus resultados financieros.P