Clarín

“Ya soy libre”: el polaco que escaló una torre en Retiro salió tras dos días preso

Marcin Banot fue rescatado del piso 27 de una torre en Retiro. El miércoles firmaría una supuesta probation.

Marcin Banot, el polaco que escaló hasta el piso 27 de la Globant Tower en Retiro, era casi un desonocido para en el país hasta el martes. Su intento, interrumpi­do por los bomberos que lo "rescataron", se hizo viral, lo mismo que sus movimiento­s. Y ayer publicó el primer posteo, tras pasar dos días preso en una comisaría porteña.

"Ya soy libre. Lo estoy haciendo bien. Todavía tengo algunas cosas que hacer con respecto a mi última subida. Próximamen­te publicaré un video en el que os contaré todo", escribió en Instagram. El texto, en polaco y en español, tiene como fondo una imagen suya subido a un árbol. Allí viste la camiseta argentina, con el número 10 de Lionel Messi en la espalda, con la que subió a la torre en Retiro. Luego, la historia sigue con otra foto en la que se lo ve haciendo la vertical en un hotel.

El influencer fue liberado en la tarde del jueves tras prestar declaració­n indagatori­a ante el fiscal de la causa por "violación de domicilio". Ese es el delito que le imputaron por treparse sin más medidas de seguridad que unos guantes. Logró llegar a un acuerdo de palabra con la Justicia porteña. Según trascendió, consistirí­a en una probation.

Deberá volver a presentars­e el miércoles ara firmar la homologaci­ón del juicio abreviado a través del que se declara culpable. El delito que le imputan prevé una pena de 6 meses a 2 años de prisión y es excarcelab­le.

No trascendió si se va a tener que hacer cargo de los costos del operativo para bajarlo de la Globant Tower, como le pidió el jefe de Gobierno Jorge Macri a la Justicia. Según fuentes del Gobierno porteño, del operativo participar­on 45 agentes, entre Bomberos, Policías y el SAME. A eso hay que sumarle los materiales y la logística.

Banot permaneció detenido en la Comisaría del Turista. El miércoles, el abogado privado que había contratado renunció y entonces quedó con un defensor oficial.