Un motochorro intentó asaltar a un policía y murió tras un tiroteo
Sus compañeros del delito lo llamaban “piloto de fuga 1” en la modalidad motochorro. Le decían “Millo” y tenía 21 años. Ayer a la madrugada manejaba una Honda GLH 150, acompañado por un cómplice, cuando quiso a asaltar a un hombre. Pero la víctima es un policía federal, que los enfrentó y lo mató.
A las 5.20, el oficial ayudante caminaba vestido de civil hacia su
trabajo, en Curumulal y Cañada de Gómez, Virrey del Pino, partido de La Matanza, cuando aparecieron los dos delincuentes. El agente, de 25 años, se identificó y empezó un tiroteo . Recibió un disparo en una pierna y “Millo” murió.
Tras el fallido asalto, el cuerpo de Franco Ezequiel “Millo” Rodríguez Miño, domiciliado en González Catán y conductor de la moto sin patente quedó tirado a unos 50 metros de la escena del hecho. Recibió un disparo detrás de la oreja derecha. Su mamá lo reconoció en el lugar. El cómplice escapó a pie.
La víctima fue trasladada al Hospital Simplemente Evita, desde donde la derivaron al Hospital Churruca, en la ciudad de Buenos Aires, con una herida de bala en la pierna derecha y fuera de peligro.
Los delincuentes se movilizaban en una moto Honda GLH 150, secuestrada por orden del fiscal Matías Folino, de la Unidad Temática de Homicidios de La Matanza.
En el lugar del asalto se secuestraron veinte vainas servidas y cuatro plomos desnudos. Según fuentes consultadas por Clarín, Folino no adoptó ninguna medida contra el policía, al considerar que, en principio, actuó en legítima defensa. Se le incautó su pistola Bersa Thunder para las pericias.
Intervienen en el caso la Estación de Policía Departamental de Seguridad La Matanza y la Comisaría Sur 3° de Virrey del Pino.
“Siempre vas a a ser mi único amor, siempre en mí vivirá tu recuerdo”, escribieron a “Millo” en Facebook. Su hermana hizo un posteo para pedir “ayuda para el velorio y entierro” y dejó un CBU.
El asaltante fallecido tenía una hija de casi 2 años. En sus redes sociales abundan las fotos de amigos que tuvieron un final a sangre y fuego como él, envalentonados por la plata fácil que obtenían en sus asaltos. “Nos estamos viendo en la otra rey. Te voy a recordar siempre, manito. Dale a fondo como siempre, un re chofer ladrón. Te amo hermanito”, lo despidió uno de sus amigos. En Facebook e Instagram también le dejaron mensajes. “Fuiste un re piloto y un buen compañero”, indicó un joven. Otro apuntó: “Siempre vas a estar en el corazón de todos los pibes. Descansá en paz, piloto de fuga 1”.