ARBA acusa a los desarrolladores por el impuestazo en countries
Tras el alerta de propietarios de barrios privados, a partir del aumento del impuesto inmobiliario de hasta el 200% anunciado por la Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires (ARBA), y cuyas facturas empezarán a llegar en febrero, la agencia salió al cruce, a través un comunicado.
El director ejecutivo de ARBA, Cristian Girard, apuntó contra los desarrolladores de estos emprendimientos inmobiliarios. "No asumen que el pago de impuestos es su ecuación de negocios y los trasladan a los compradores a través de las expensas", sostuvo. Y aclaró que el organismo impulsa desde 2022 medidas que apuntan a regularizar la situación de esas viviendas.
Como informó Clarín el sábado, el problema se da en propiedades que aún no cuentan con subdivisión, lo que lleva a que buena parte de los contribuyentes abonen “impuestos provinciales como grandes terratenientes”, habían denunciados los propietarios y eso provocó la respuesta oficial.
Es que se les aplica una alícuota más elevada que si el lote estuviera escriturado.
El inconveniente lleva varios años, pero la sensibilidad sobre el tema recrudeció a partir de la última fuerte suba del impuesto.
Pese a que ARBA aún no emitió las boletas, como remarca la agencia, "concretamente, se trata casas ubicadas en barrios que aún no cuentan con subdivisión, por lo que de acuerdo con los desarrolladores, deberán afrontar cuotas del Inmobiliario por $ 90 mil, cuando en otros emprendimientos que ya están escriturados el monto desciende a $ 5 mil".
La agencia aclaró que el problema radica en que el desarrollador del emprendimiento no inicia el trámite para poder escriturar y les cobra a los propietarios el Inmobiliario en las expensas.
Insisten en que "al no estar terminada la subdivisión de los terreno, nos, no sabemos qué les están cobrando los desarrolladores".
El tema cobró visibilidad a partir de que un grupo de vecinos de la zona de Pilar del Este había iniciado una petición en la plataforma Change.org, con el objetivo de juntar firmas a fin de que ARBA modifique los criterios para determinar el impuesto inmobiliario.
Los vecinos calcularon que pasarían de pagar 5 cuotas de $ 56.000 a 5 cuotas de $ 168.000, incluso con casos de $ 160.000 a $ 480.000.
El inconveniente surge desde que los barrios de esta zona comenzaron con los trámites para escriturar cada propiedad. Según los vecinos, demora cinco años.