Diálogo de opuestos en un chalet marplatense
La obra rescata una de las tipologías de la ciudad y la resignifica con un nuevo bloque que se contrapone con el original.
La obra consiste en la puesta en valor y ampliación de un chalet marplatense, que desde hace ocho años funciona como local comercial.
El sector nuevo del edificio toma la altura del entorno, enchapando la medianera y a su vez quebrando el eje ortogonal de la cuadrícula propia de la manzana, para otorgarle singularidad al chalet. Este elemento, a su vez, logra enfatizar la condición de esquina y aumentar su visibilidad.
Para generar mayor espacio público y dar una respuesta a la densificación, el edificio se retranquea, provocando un ensanche de la vereda y generando un punto de encuentro que enriquece la relación del edificio con la ciudad.
El conjunto edilicio procura poseer materiales nobles, de expresión estética y representatividad histórica, buscando un diálogo entre pasado, presente y futuro. Por un lado, se busca poner en valor la materialidad del chalet, restaurando la madera y recuperando el estado de la piedra y la cubierta de tejas. El área nueva del edificio no busca la mímesis con el patrimonio sino diferenciarse a partir de una imagen contemporánea conformada por formas puras y materiales y colores que difieren del chalet.
Hormigón visto, aluminio negro y vidrio conservan la expresividad propia del material al igual que ocurre con la piedra, la madera y la teja en el chalet.
El diseño del límite del edificio busca guionar la interacción con las personas que transitan por la esquina, tanto a nivel peatonal como vehicular, otorgando de este modo la trasparencia indicada para invitar a ingresar al local.
Una secuencia de planos opacos y translúcidos, que toman como referencia el límite existente en el chalet, se repiten en el sector nuevo del edificio para “espiar” el interior del local.
Se diseñaron la estructura y la materialización de la obra para potenciar la idea arquitectónica y para dar respuesta al pedido de los dueños de que la construcción debía desarrollarse con el local abierto y funcionando en simultáneo.«